l Tribunal Oral en lo Criminal de Ushuaia condenó el viernes a 8 años de prisión, más accesorias legales y costas, al empresario Héctor Darío “El Gringo” Weiss, acusado del abuso sexual de dos niñas, para quien un fiscal había solicitado semanas atrás omitir el debate y aplicarle pena mínima, con los argumentos de que “no tiene estudios secundarios completos” y es “único sostén de familia”.
Pese a que la pena es a prisión efectiva, el empresario continuará en libertad hasta tanto la sentencia quede firme, siguiendo una jurisprudencia del Superior Tribunal de Justicia que así lo establece.
El veredicto dado a conocer en horas de la tarde halló a Weiss, de 47 años, como autor “material y penalmente responsable de los delitos de abuso sexual simple (reiterado en un número indeterminado de veces), y abuso sexual por acceso carnal”.
El propietario de concesionarias de autos y de una distribuidora de bebidas, fue hallado culpable de haber abusado de dos víctimas, una de 8 años y otra de 14, aprovechándose de la relación de confianza que mantenía con la familia de cada una de las menores.
La situación del empresario tomó notoriedad semanas antes del inicio del juicio, cuando el fiscal Nicolás Arias requirió la “omisión de debate” (es decir que el juicio no se hiciera) basada en “atenuantes” y la aplicación de una condena de tres años de prisión en suspenso.
La reacción de los familiares de las víctimas, que intervinieron como partes querellantes del proceso, derivó en que la posibilidad fuera desechada de inmediato (la figura de la omisión requiere del acuerdo de las partes) y la fecha de juicio se mantuvo.
Sin embargo, los fundamentos de Arias determinaron que fuera separado de la causa por el jefe de Fiscales de Tierra del Fuego, Oscar Fappiano, y que el Consejo de la Magistratura de la provincia iniciara una investigación de oficio por presunto mal desempeño.
El fiscal que reemplazó a Arias en el caso, Eduardo Urquiza, pidió en su alegato una condena coincidente con la que terminó aplicando el tribunal, y similar a la que también solicitó una de las partes querellantes.
Los jueces Alejandro Pagano Zavalía (presidente de la audiencia) Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy rechazaron también el viernes un pedido de “prisión preventiva”, con lo que Weiss se retiró en libertad del recinto, y seguirá en la misma condición hasta que la sentencia quede firme, confirmaron a EDFM fuentes judiciales.
La razón de ello es una jurisprudencia del Superior Tribunal de Justicia que a su vez recogió un antecedente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
De acuerdo a este criterio, el imputado sigue manteniendo la presunción de inocencia hasta agotar las instancias de apelación, ya que todavía puede recurrir a la Corte provincial a través de un recurso de casación.
La “prisión preventiva” que podría llevarlo a la cárcel, tiene que estar fundada en sospechas ciertas de que el condenado quiere escaparse o eludir la acción de la Justicia, algo que los jueces no dieron por demostrado en el caso de Weiss, quien se presenta puntualmente a los controles que le impusieron.
“Ni pestañeó”
La Justicia demostró que el empresario sedujo y mantuvo una relación sentimental durante seis meses con la menor de 14 años, a quien manoseó en reiteradas ocasiones y con la que finalmente tuvo relaciones sexuales hasta que la chica pudo dar cuenta de lo que estaba ocurriendo y su madre realizó la denuncia penal.
A su vez, la investigación sumó evidencias para procesar al mismo hombre por los “reiterados tocamientos” que le profirió a una niña cuando tenía 8 años, y hasta que cumplió 11 o 12 años, en un hecho que salió a la luz cuando la menor, ya con 13 años de edad, logró contar lo que le había ocurrido a una profesora del colegio que tomó intervención en el caso y posibilitó que los padres radicaran la denuncia.
El empresario condenado el viernes prestó declaración indagatoria en la primera audiencia del proceso (realizada el lunes 7) y fue allí primera vez se refirió a los hechos incluidos en la acusación: negó haber tocado a una de las pequeñas y admitió haber mantenido una relación con la otra, aunque sostuvo que fue de manera “consentida” y porque “estaba enamorado de ella”.
Según los familiares de las víctimas, el hombre “ni pestañeó” cuando se enteró de la condena, y “parece no entender todavía la gravedad de sus actos”.
“Queda claro que en el caso del abuso con acceso carnal se aprovechó de la inmadurez de la niña para seducirla”, aseguró a la prensa el fiscal Urquiza una vez conocido el pronunciamiento judicial.
Por su parte la abogada Karina Echazú, representante de una de las querellas, sostuvo que la decisión de los magistrados “los dejó conformes” y que, en este caso “el desempeño de la Fiscalía fue el adecuado”.
