l intendente Gustavo Melella enfrenta por estas horas dos frentes de tormenta por la situación de soluciones habitacionales que fueron presentadas con bombos y platillos en su gestión frente a la Municipalidad. Uno de ellos es la falta de transparencia y control en la ocupación de terrenos en el sector de Chacra XI y otro, está relacionado con el Fideicomiso San Martín Norte.
En el caso de Chacra XI, el Municipio hace mucho que viene evadiendo respuestas concretas sobre un censo que se debe hacer en ese sector de la ciudad, para corroborar que los terrenos están debidamente ocupados y ello se debe a que se pudieron advertir muchos que son baldíos y, como contracara, hay predios donde existe una suerte de “hacinamiento”, porque lo ocupan dos familias, con sus respectivas viviendas.
El pedido de informes que aprobó en su momento el Concejo Deliberante, solicitaba los datos filiatorios y las direcciones de un número de familias que estarían en situación irregular, sin respetar el espíritu que llevó a urbanizar Chacra XI. A ciencia cierta se quiere saber cuántos terrenos no están ocupados y que no cumplieron con la Ordenanza 895; pero la única respuesta que se recibieron fueron evasivas, lo que denota cierta falta de transparencia.
Por lo pronto, se está exigiendo que se cumpla con el código de planeamiento urbano, para evitar que en Chacra XI prolifere la ubicación de más de una vivienda en un mismo terreno, en tanto que se puede observar que hay otros predios que están sin ocupar y de a poco surgen baldíos, a pesar de la demanda habitacional que persiste en Río Grande.
Reclamo general
“El Estado tiene que hacer todo lo posible para ayudar a aquellos que no pueden acceder a una vivienda, pero estas iniciativas privadas complementan ese trabajo y son fundamentales para otras personas que quizá pueden acceder al pago de una cuota lógica y razonable”.
Las palabras pertenecen al intendente Gustavo Melella, al hacer mención al Fideicomiso San Martín Norte, un emprendimiento que tiene como responsables a la empresa BC Construcciones y que por estas horas también es frente de tormenta para la gestión municipal, porque mucha gente que ha pagado las cuotas pactadas, se encuentran con plazos vencidos por contrato para que se les haga entrega de sus terrenos y de esa forma poder comenzar a construir sus vivienda, agobiados por no poder pagar más un alquiler.
De esta manera, los vecinos que han adquirido terrenos del fideicomiso San Martin Norte, ante la no entrega de los mismos en el tiempo determinado por contrato por la empresa, se están autoconvocando para poder programar algún tipo de reclamo general, dado que no son escuchados de manera independiente.
El Fideicomiso está integrado por 1800 familias que se esperanzaron en ésta solución habitacional que tuvo al intendente Gustavo Melella como un promotor de lujo, alentando a la gente a inscribirse.
Desde la empresa, Luis María Barrenechea brindó explicaciones públicas y dijo que hay demoras en la Dirección de Catastro de la Municipalidad y también en Catastro de la Provincia, debido al volumen de la documentación, teniendo en cuenta que se trata de 1800 lotes.
Además el empresario sostuvo que en el tendido del alumbrado público hay demoras porque surgió una situación legal con la empresa que fue contratada para ese trabajo, pero que esperan poder superar en un tiempo perentorio.
