El 28 de marzo de 1882

El exceso de náufragos impone el fin de la expedición de Bove

28/03/2016
P

or Bernardo Veksler

Este día, la Expedición Austral Argentina decide poner fin a la exploración de la isla de los Estados, debido a la gran cantidad de náufragos rescatados, que establecían severos límites a sus provisiones y capacidad de navegación.
La Expedición Austral Argentina contaba con la jefatura científica del teniente italiano Giácomo Bove y el mando militar del teniente coronel de marina Luis Piedra Buena. Fue patrocinada por el Instituto Geográfico Argentino, que logró la firma de un decreto que autorizó la expedición,  limitándola al extremo sur continental.    
Se asignó la goleta Cabo de Hornos para la misión, que partió el 18 de diciembre de 1881.  El equipo científico estaba integrado por el geólogo Doménico Lovisato, el zoólogo y botánico Decio Vicinguerra, el pintor y fotógrafo Giovanni Roncagli y el naturalista Carlo Spegazzini. El grupo militar lo conformaban el capitán Edelmiro Correa, el subteniente Rodolfo Galeano; los guardiamarinas Juan M. Noguera, Juan L. Murúa, José M. Achával e Ignacio Vila y los aspirantes Adolfo Archel y Esteban de Loqui. Además, el cirujano Edmundo Puch, el comisario Fermín Eguía, el farmacéutico José Frigerio y sesenta marineros.
Los expedicionarios pasaron tres días en la isla Pavón, y el 30 de enero descendieron por el río Santa Cruz. La Cabo de Hornos siguió por las costas fueguinas y el 5 de febrero se detuvo en Policarpo. Llegó a la isla Año Nuevo y luego a Puerto Cook, donde se desarrolló la mayor parte de los trabajos.
En esos días, la barca anglo americana Pactolus se había estrellado contra las rocas. También se incendió la nave inglesa Capricorn. Piedra Buena recogió a los náufragos de ambas.    
Los científicos y ayudantes caminaron largos trechos, treparon montañas, registraron observaciones, comprobaron cortes geológicos y estudiaron presencias biológicas. Pero las condiciones climáticas y logísticas, agravadas por el número de náufragos rescatados, urgieron un viaje a Punta Arenas.
Bove se mostraba fastidiado por estas limitaciones, pero consiguió la goleta San José que lo trasladó hasta el Beagle y llegó a Ushuaia el 3 de mayo. Bove permaneció algún tiempo en la misión anglicana y acompañado por Bridges avanzó hacia el oriente. En bahía Sloggett debió encallar la nave y fue recogido por la Allen Gardiner para regresar a Ushuaia.

Etiquetas
Cuál es tu opinión sobre la nota?
  • Me gusta
    100%
    5 votos
  • No me gusta
    0%
    0 votos
  • Me da igual
    0%
    0 votos