l comerciante inglés Samuel Fisher Lafone adquiere tierras en Malvinas y, este día, el gobierno hace efectiva la correspondiente concesión, “lo que demuestra el propósito inglés de afianzarse” en las islas y salir del marasmo colonizador que hasta entonces había tenido “muy poco éxito”, desde la ocupación manu militari de 1833. La concesión abarcó una “gran península que luego se llamaría Lafonia, justamente por Lafone y también las islas adyacentes, un terreno cerca de Stanley y otras tierras isleñas” (Laurio H. Destéfani. El cónsul Smiley y su discípulo Luis Piedra Buena).
“Desde Montevideo se envían entonces gauchos uruguayos para encargarse de la explotación del ganado vacuno en estado salvaje, que había aumentado enormemente (…) Se calcula que el ganado vacuno en el año 1846 ascendía a 60.000 cabezas y al año siguiente esa suma llegó a 80.000. Solamente unos 400 vacunos eran “amansados”. Los caballos sumaban unos 3.000 ejemplares”.
Hasta ese momento, la explotación de las pieles de lobos marinos era la actividad más importante de las islas y persistió como un rubro destacado durante dos décadas más.
Lafone nunca se hizo presente en las islas, manejaba todo desde Montevideo o Londres a través de sus dependientes y capataces. Pasado algunos años sin obtener los beneficios previstos, su hermano Alejandro Ross “promocionó el negocio de las islas y en enero de 1851 se constituyó una compañía comercial que se llamó “The Falklands Islands Company”, de Londres (…) La compañía se hizo cargo de los negocios de Lafone, otorgándole 200 acciones de las 1.000 que componían su capital; lo comisionó como gerente local y le abonó 30.000 libras y al gobierno de Stanley 20.000”.
A partir del éxito de la adaptación ovina a las islas, se desarrolló una nueva actividad productiva que paulatinamente desplazó a la explotación del ganado cimarrón, que comenzó a declinar.
The Falkland Islands Company “es la dueña desde entonces del monopolio ganadero lanar de las Malvinas, dueña de la explotación de toda Lafonia, de 138 islas adyacentes con numerosos puertos”. Se fue convirtiendo en una corporación que concentró toda la actividad económica del archipiélago y tuvo una gran incidencia en las decisiones políticas adoptadas por el Reino Unido.
