o pudieron llegar a Río Grande como lo querían hacer el día sábado. Pero al menos los cientos de pasajeros varados en Buenos Aires pudieron llegar ayer al Aeropuerto de Ushuaia y desde la capital fueguina debieron viajar por tierra hasta el norte provincial.
Pasadas las 17.30 arribó uno de los aviones que partió de Ezeiza con pasajeros que esperaban desde el sábado cuando los aeropuertos fueguinos cerraron por la intensa niebla que reinaba en la provincia. La gente se mostró molesta con toda lógica y se sintieron en situación de abandono ya que desde Aerolíneas Argentinas no tuvieron mayor explicación ni certeza. Fueron 4 días de espera hasta que pudieron llegar hasta Tierra del Fuego.
Por su parte el diputado Martín Pérez reclamó a través de una nota al Ministerio de Transporte de la Nación. Remarcó el carácter de provincia aerodependiente y reclamó por la desatención que debieron padecer los cientos de fueguinos en Ezeiza y Aeroparque.
A través de sendas notas dirigidas tanto al titular del área de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, como a la de la línea aérea de bandera, Isela Costantini; el diputado trasmitió su “profunda preocupación por la falta de respuestas a los pasajeros”, tras la reiterada cancelación de vuelos hacia la provincia.
Reclamó en este sentido que la empresa “se ha desentendido de la situación por la que atraviesan los pasajeros” y que no ha garantizado “las necesidades básicas como alojamiento y comida para sus clientes” haciendo hincapié en el gasto que conlleva la permanencia en la ciudad de Buenos Aires a la espera de una respuesta.
Solicitó mediante la misma intervención inmediata “para garantizar las comodidades de los pasajeros” apuntando la posibilidad de habilitar vuelos adicionales a destinos cercanos para posibilitar el regreso de los pasajeros.
Recordó también la condición de provincia aerodependiente que tiene Tierra del Fuego y la falta de “un cruce soberano por aguas argentinas”.
