l juicio oral y público que se lleva a cabo en Ushuaia por la presunta tala ilegal de 200 árboles en el interior del Parque Nacional Tierra del Fuego reiniciará hoy a las 19.30 con la etapa de alegatos de las partes, confirmaron fuentes judiciales.
Las audiencias debían retomarse ayer a la mañana pero el Tribunal Oral en lo Criminal de la provincia decidió la reprogramación debido a que uno de los jueces, que subroga el cargo, debía cumplir con otros compromisos en la ciudad de Río Gallegos, en Santa Cruz, agregaron las fuentes.
El caso ocurrido en 2005 involucra a tres personas que fueron contratadas por una empresa turística para realizar la apertura de una senda lindera al área natural protegida, y que según la acusación fiscal, cruzaron el límite y terminaron talando los árboles dentro del parque.
Los alegatos comenzarán con la exposición del fiscal general del distrito, Adrián García Lois, quien acusa a los imputados del presunto delito de “daño agravado en concurso ideal con tentativa de usurpación”, una figura penal con penas de hasta 4 años de prisión.
En el juicio también interviene una parte querellante representada por abogados de la Administración de Parques Nacionales (APN).
El organismo considera que se trata de un “caso emblemático” para la protección ambiental por el antecedente “ejemplificador” que puede sentar a futuro.
A su vez, los jueces también escucharán el alegato defensor de los imputados, que son el responsable profesional y técnico de la obra, Ricardo Bianciotto, el agrimensor Horacio Burgos, y el maestro mayor de obras Orlando Rubén Mansilla Ruiz.
Los tres fueron contratados por la empresa Patagonia Spirit para abrir una senda de 2202 metros de longitud entre la Ruta Nacional Nº3 y el Canal Beagle.
Según la acusación, en ese trayecto, el camino ingresó en tres oportunidades al área protegida, invadiéndola en un total de 379 metros, mientras que pericias posteriores estimaron que la tala alcanzó a un número de entre 216 y 255 árboles de diferentes diámetros, afectándose 216 metros cúbicos de madera, 121 de lenga y 95 de guindo.
Por su parte, tanto los enjuiciados como la empresa sostienen que la tala se realizó fuera de los límites del Parque Nacional, y que los mojones que delimitan el área protegida se encuentran colocados en lugares equivocados, debido a una demarcación inexacta realizada por el topógrafo que la efectuó hace 50 años.
La investigación judicial lleva 11 años de sustanciación porque, entre otras controversias, el mismo tribunal que ahora realiza el juicio, les había concedido la probation (suspensión del juicio a prueba) a los tres involucrados, lo que impidió la realización del proceso oral en abril de 2015.
Entre los testigos declararon una decena de gendarmes y guardaparques, con la particularidad de que todos los hicieron a través del sistema de videoconferencia ya que no residen más en jurisdicción fueguina.
