uego de que el ministro de la Producción anunciara la eliminación de los aranceles de importación para productos de informática terminados a partir de marzo próximo, el Gobierno Nacional confirmó que continuará “trabajando y pensando ideas en conjunto con la industria, en la búsqueda de la mejora de su competitividad para los próximos años y del cuidado del empleo en ese contexto”.
La definición surgió de boca del secretario de Industria, Martín Etchegoyen, tras la reunión que la semana pasada mantuvo el ministro de la Producción con las empresas que integran la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Eléctrica (AFARTE). Según el funcionario nacional, ese encuentro fue parte de la agenda de reuniones que vienen manteniendo “con los principales referentes de la producción, en el marco de la decisión del Gobierno de continuar con el régimen de promoción industrial y los planes de desarrollo productivo para la provincia de Tierra del Fuego”.
Etchegoyen, a través de una gacetilla oficial, señaló que “el régimen está vigente hasta el 2023” y que “nos reunimos permanentemente con empresas, sindicatos, y gobierno provincial de Tierra del Fuego, para analizar y trabajar juntos en los planes de desarrollo para la provincia. De hecho, es la provincia con la que más hemos dialogado en estos meses, buscando mejorar la competitividad de las empresas y los precios de sus productos para nuestros consumidores y nuestras PyMES”.
La escueta información oficial se vio complementada por una nota publicada por el diario La Nación que menciona que la administración Macri “acelera el trabajo sobre la conformación final del valor de los productos en Tierra del Fuego. El objetivo es claro: bajar los precios de celulares, televisores, aires acondicionados y microondas sin destruir los 12.600 trabajos de esta industria y respetando, por lo menos hasta 2023, el régimen de excepción”.
El artículo firmado por Francisco Jueguen señala que para avanzar en ese objetivo “en los próximos días se conformará una mesa de trabajo compuesta por el Ministerio de Producción, el gobierno fueguino y la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (Afarte), que engloba a las principales firmas de Tierra del Fuego entre las que se destacan Newsan y BGH” para trabajar “en hacer más eficientes los procesos de producción en las fábricas, pero también en los altos costos de logística, impuestos, y el retail y la financiación que ofrecen los bancos”.
"No es simple. Es un proceso complejo que debe ser gradual y consensuado", afirmó Etchegoyen. "Queremos que bajen los precios, por lo que vamos a crear una mesa de trabajo con el sector. Todo está bajo análisis", agregó el funcionario.
Según La Nación “para impulsar la competencia, las autoridades no descartaron la revisión del llamado impuestazo tecnológico aprobado en noviembre de 2009, que subió el IVA e impuestos internos a productos tecnológicos y aumentó los aranceles de -entre otros biene- los celulares y los aires acondicionados. Todo, aclaran, es todavía muy prematuro".
El artículo en cuestión recoge también la opinión del Ministro de Industria de la Provincia. Ramito Caballero sostuvo que se trata de “ un trabajo en conjunto" con el que se busca “mejorar los precios y la competitividad. Pero no es un problema de Tierra del Fuego. Es estructural de la Argentina".
El medio nacional sostiene que cámaras de fotos, decodificadores y DVD son algunos de los productos que, incluso en la isla, creen que dejarán de existir simplemente porque son obsoletos, y que una de las propuestas que desde la Provincia se quiere presentar a Nación es la creación de un polo de autopartes en Tierra del Fuego. “No es casualidad. Allí está radicada Mirgor, la empresa de Nicolás Caputo, íntimo amigo del presidente Mauricio Macri. Por otro lado, la posibilidad de producir tecnología para autos en Tierra del Fuego atrae por los fuertes beneficios que ya existen en la isla y por los que otorga la nueva ley de autopartes impulsada por el propio Macri y aplaudida por el sector. Eso, creen, otorgaría una ventaja comparativa. Mirgor es de las únicas firmas que exporta sus productos: una de las varas oficiales para medir la competitividad. Otra clave: esta semana Caballero estuvo en la planta de Toyota en Zárate. Además, se buscan impulsar otras actividades como la proximidad antártica para operaciones logísticas, el turismo, la pesca o la industria maderera”.
En tanto, el titular de AFARTE, Federico Hellemeyer, precisó que “este no es un trabajo que el ministerio proponga unilateralmente, sino que nosotros venimos trabajando en esto y somos conscientes de que tenemos que llevar adelante un ejercicio de competitividad y lograr que nuestros precios de venta al público bajen” en el mejor de los casos “hasta un 20%. Eso depende de que sean exitosas todas las medidas que proponemos”, dijo en declaraciones a Radio Nacional Ushuaia.
Sostuvo que “en toda la producción hay un margen de optimización de entre el 5 y el 7 por ciento”.
Según la Nación, y en base a una trabajado de la Consultora Abeceb el valor final de un producto elaborado en nuestra provincia está conformado en un 6% por salarios; 34% por los insumos (33% los importados y 1% los nacionales); 4% por logística; 3% por gastos en Tierra del Fuego; 7% por gastos de Administración y comerciales; 6% por impuestos internos y tasas de verificación y 4% por la renta de la empresa productiva, más un 19% de gastos, impuestos y rentabilidad de la empresa minorista (comercializadora); 11% de gastos de financiamiento y 6% de IVA.
En tanto, en la página de la Secretaría de Desarrollo e Inversiones del Gobierno de la Provincia se informa que en la actualidad el costo de ingreso de mercaderías a Tierra del Fuego vía terrestre es de 170,8 dólares por tonelada contra los 151,3 dólares por toneladas vía marítima.
