utoridades del gobierno de Tierra del Fuego bautizaron el lunes al salón de usos múltiples de la escuela Nº38 “Presidente Raúl Alfonsín”, ubicada en la Base Esperanza de la Antártida Argentina, con el nombre del maestro antártico Adrián Allaman, el primer docente fallecido desde la transferencia de ese establecimiento educativo a la provincia en 1997.
El maestro de grado se desempeñó en la escuela 38 durante todo el año 2006, junto a su esposa Yolanda Veloso que dirigió el colegio y a su hijo Martín, por entonces de 13 años.
El docente, que también cumplió funciones en la escuela Nº 22 y el colegio Los Andes de Ushuaia, falleció en junio de 2015 a los 46 años, víctima de una enfermedad, y meses después nació la iniciativa de efectuarle un reconocimiento dándole su nombre a un sector de la escuela antártica.
El homenaje se llevó a cabo luego de un complejo operativo de traslado de una comitiva de funcionarios desde la ciudad de Río Gallegos, en la provincia de Santa Cruz, hasta las bases Marambio y Esperanza, aprovechando una ventana climática que posibilitó los vuelos consecutivos en avión y en helicópteros, explicaron fuentes oficiales del gobierno fueguino.
El vicegobernador provincial, Juan Carlos Arcando, encabezó la concreción de esta iniciativa, junto al ministro de Educación, Diego Romero y otras autoridades del Ejército y la Fuerza Aérea que partieron en un avión Hércules desde Río Gallegos hacia la Antártida.
Luego del aterrizaje en la Base Marambio, el periplo continuó con un segundo traslado de media hora en dos helicópteros hasta la Base Esperanza.
El acto y una breve recorrida por el establecimiento escolar se realizaron a lo largo de una hora, que fue el tiempo máximo sugerido por los meteorólogos para asegurar el regreso a Santa Cruz.
“En este lugar la provincia ejerce su jurisdicción sobre el sistema educativo. Los maestros son designados luego de un complejo sistema de selección y la escuela se mantiene gracias a la colaboración de las fuerzas armadas, cuyas unidades operacionales garantizan con gran esfuerzo el envío de materiales desde la ciudad de Ushuaia”, expresó Arcando en la ceremonia.
También reconoció la labor de los docentes antárticos, y en especial la de Allaman, que “hizo Patria en este lugar y es el primero que nos ha dejado físicamente desde la inauguración del establecimiento educativo”, explicó el funcionario.
El matrimonio de docentes que cumple funciones este año en la Base Esperanza está integrado por Julio Palavecino y por Griselda Ramírez, quienes convivirán allí junto a su hijo César, que irá a tercer grado y Nazareno que cursará el cuarto grado.
La escuela provincial 38 tendrá en 2017 8 alumnos y alojará a otros 7 que estudian el nivel secundario a distancia.
Palavecino dictaba clases en la escuela 44 de Río Grande, mientras que Ramírez lo hacía en las escuelas 21 y 23 de la misma ciudad.
