l análisis pormenorizado de un meteorito hallado en la Antártida permitió detectar un extraño mineral que fue bautizado wassonita. El científico Keiko Nakamura-Messenger, al informar sobre el hallazgo, explicó: “La wassonita es un mineral formado por sólo dos elementos: el azufre y el titanio; sin embargo, posee una estructura cristalina única que no ha sido previamente observada en la naturaleza”, según la nota aparecida, este día, en el periódico “Síntesis”, de Puebla, México.
El meteorito fue estudiado por un equipo de investigación de la NASA, encabezado por Nakamura-Messenger. Luego de su identificación, fue incorporado a la lista de los cuatro mil quinientos minerales oficialmente reconocidos por la Asociación Mineralógica Internacional.
La wassonita fue encontrada en el meteorito “Yamato 691”, que probablemente tenía su origen en un asteroide que orbitaba entre Marte y Júpiter. El elemento detectado está “entre los más pequeños, pero más importantes, minerales identificados en la muestra”, que tiene una antigüedad de 4.500 millones de años.
“En 1969, los miembros de la Expedición Antártica Japonesa de Investigación descubrieron nueve meteoritos en el campo de hielo azul de las montañas de Yamato en la Antártida. Esta fue la primera recuperación significativa de meteoritos antárticos y representó muestras de diferentes tipos. Como resultado, los Estados Unidos y el Japón llevaron a cabo un seguimiento sistemático de búsqueda de meteoritos en la Antártida, en la que se recuperaron más de 40 mil especímenes, incluidos meteoritos marcianos y lunares extremadamente raros”.
Los estudios sobre el material permitieron encontrar “minerales adicionales desconocidos rodeados por wassonita”, que continúan siendo analizados.
De la muestra donde fue detectado este mineral, se extrajo un elemento menor a “una centésima parte del grosor de un cabello humano. Habría sido imposible descubrirlo sin un microscopio electrónico de transmisión de la NASA, que es capaz de aislar los granos de wassonita y determinar su composición química y estructura atómica” (op.cit.).
Según la revista “Nature”, la wasonita “contendría las claves para confirmar que existen grandes cantidades de agua en las profundidades de la Tierra así como el origen del agua, la cual podría provenir del espacio o existir desde la formación inicial del planeta”.
