Millones de peces quedan varados en las playas del Beagle
El 9 de mayo de 1877

Millones de peces quedan varados en las playas del Beagle

09/05/2018
A

lrededor de esta fecha, Tomas Bridges se asombra por la cantidad de peces que se acercan a las costas del Beagle, despertando una atracción inusual de los nativos que se hacen un festín con el obsequio brindado por la naturaleza.
“Ha habido una abundante existencia de “ia-ca-si”, un término nativo que incluye el tipo de pescado como la sardina y la caballa e incluso aves y lobos, que hacen presa de ellos. Las sardinas eran tan abundantes que a veces eran dejadas en grandes masas en las costas a nuestro alrededor y durante algunos días apenas no se podía respirar el aire por el hedor de millones de peces que literalmente cubrían las costas de la caleta” (Tomas Bridges. Los indios del último confín).
Bridges escribió sobre la variedad de peces que participaban del fenómeno: “Cuatro tipos –o más bien, cinco- de peces se encuentran junto con las sardinas que sin duda son más grandes que las que hay en las costas de Inglaterra. Estos cinco tipos de peces son excelentes en gusto y sustancia y sus hígados proporcionan a los nativos abundancia de aceite para la estación. La excitación entre los nativos cuando los cardúmenes se acercaban a la costa fue enorme. Siempre era de noche y acostumbraban observar cuidadosamente la costa. El ruido que hacían las miríadas de peces que se acercaban era como el agua cuando corre rápidamente; podíamos oírlo, inclusive a unas 400 yardas. Los nativos, provistos de anzuelos para las sardinas y lanzas para los peces mayores obtenían grandes cantidades y entretanto vivían sólo de pescado”.
Pero el festín natural se veía enriquecido con la fenomenal producción de hongos que ofrendaban los bosques. Los alimentos sumaban la “extraordinaria cantidad del principal hongo de invierno, llamado “usúf, pero ahora, cuando no está maduro, “macéenik”. Este es un gran sostén por lo menos por cinco meses y es muy apreciado por los nativos”.
Para entonces, Bridges se desempeñaba como superintendente de la Misión Anglicana de Ushuaia y escribía con cierta regularidad cartas a la “South American Missionary Society”, que eran publicados en la revista de la entidad. Allí, reflejó las características de la naturaleza fueguina, de su fauna y, sobre  todo, de los nativos, en cuyas páginas se fue reflejando su decadencia, acosada tanto por la disminución de recursos alimentarios como por las enfermedades que los diezmaron en muy pocos años.

Autor : Bernardo Veksler
Etiquetas
Cuál es tu opinión sobre la nota?
  • Me interesó
    100%
    9 votos
  • No me interesó
    0%
    0 votos