oluntarios, empresas, comercios y vecinos en general, sumaron voluntades para la ‘Juntada de Primavera’ de tapitas, llaves de bronce, papel, placas radiográficas y latas de aluminio en beneficio de la Fundación Garrahan que se llevó adelante el sábado pasado en Ushuaia.
Reunidos en el Cuartel Central de Bomberos –Magallanes y Don Bosco-, los voluntarios encabezados por la coordinadora a nivel local, Viviana Remy, recibieron material durante toda la tarde. Hacia el final de la jornada, completaron dos camiones con elementos reciclables, y más cajas que serán enviadas a la Fundación en la próxima juntada.
“Cada vez son más los vecinos que acercan estos materiales pensando en los chicos de la Fundación”, valoró Remy, y detalló que “juntamos muchísimas tapitas, que trajeron las familias y también los chicos por las competencias de interbandos, intertribus e intercolores”.
Según indicó, “más de 380 bidones fueron clasificados en el Cuartel de Kuanip y entregados en el Cuartel Central, además de las donaciones que fuimos recibiendo nosotros”. Y destacó “el gesto de mucha gente, que tomó conciencia e incorporó el hábito de juntar las tapitas y clasificarlas, porque incluso muchos las llevaron separadas por color”. Es que la Fundación recibe mayor dinero por entregar las tapas diferenciadas.
En el caso del papel, “recibimos mucha cantidad de parte de distintas reparticiones públicas, que fueron juntando el papel en desuso para llevarlo a la juntada”, celebró Remy, “también la gente llevó su carga de papel”, agregó. “Eso es la muestra de que entre todos sumamos más, y hacemos la diferencia no sólo en casa, sino en nuestro lugar de trabajo o en la escuela”, sostuvo.
El programa de reciclado de la Fundación Garrahan tiene dos objetivos: el ecológico, ya que esos materiales reutilizables no se depositan en el relleno sanitario; y el solidario, ya que a partir de ellos se fabrican nuevos productos cuya comercialización sirve para sustentar económicamente el funcionamiento de la Casa Garrahan, donde se alojan niños de todo el país durante el tratamiento médico; capacitaciones del personal médico, insumos y mejoras edilicias.
Remy agradeció especialmente “a los bomberos, que una vez más abrieron sus puertas para que la juntada sea exitosa, y colaboraron durante toda la tarde, nos cocinaron y compartieron con todos los voluntarios”; además “nos acompañaron los scouts Timaukel, las guías navales Stella Maris, las guías de Nuestra Señora de las Nieves, docentes, alumnos y padres de Ushicana; los Guardianes del Ambiente encabezados por Matías Núñez Olivera, embajador de la ciudad; familia y amigos”, valoró.
Durante la juntada, integrantes del Cuartel de Bomberos 2 de Abril repartieron folletería informativa sobre la prevención del cáncer de mama, anticipando la Jornada de Concientización que realizarán el 3 de noviembre.
La ‘Juntada de Primavera’ fue posible también gracias a la colaboración de empresas que aportaron la logística en forma gratuita: Fraser y Logística Antártica donaron los camiones; Ambassador las cajas, entre otras firmas que se sumaron a la cruzada solidaria. “También quiero agradecer la predisposición y el compromiso de los despachantes de aduana Alfredo Conti y Francisco, que hicieron todos los trámites para que la primera carga saliera el mismo sábado”, valoró Remy.
La coordinadora de Fundación Garrahan a nivel local expresó “un especial agradecimiento a los medios de comunicación, como El Diario del Fin del Mundo, por la difusión y concientización sobre los programas de reciclado, porque con su apoyo permanente cada vez hay más conciencia entre la gente, sobre la importancia de recuperar estos elementos”, dijo.
Elementos que pueden recuperarse
La coordinadora a nivel local, Viviana Remy, aprovechó la ocasión para aclarar que los programas de reciclado del Garrahan reciben exclusivamente papel, tapitas de plástico, llaves de bronce, placas radiográficas y latas de aluminio.
“No podemos recibir otros materiales”, explicó. “No juntamos pilas ni cartón, y en el caso de las latas, recibimos las de aluminio, que son las de gaseosa o cerveza”, remarcó. De allí se extrae el aluminio para la fabricación de nuevos productos, tal como en el caso de las placas de radiografías, de las cuales se recupera el metal (plata) para comercializarlo en beneficio de la Fundación.
El papel vuelve a la cadena de consumo en servilletas, papel de cocina e higiénico; las tapitas se transforman en baldes, palitas, perchas, broches y además, el plástico se utiliza para la creación del novedoso ‘eco-triciclo’.
