ste día, en la ciudad de Buenos Aires, se reúnen los gobernadores de las provincias productoras de hidrocarburos y dejan constituida la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI ).
Los mandatarios participantes fueron José Octavio Bordón, por Mendoza; Ricardo Jaime Del Val, por Santa Cruz; Fernando Cosentino (vicegobernador), por Chubut; Luis Galarde (secretario de Energía y Minería), por Neuquén; Guillermo Rodríguez Santos, por Río Negro; Hernán Cornejo, por Salta; Gildo Insfran (vicegobernador), por Formosa; Néstor Alcala, por La Pampa, y Emilio Carrará (vicegobernador), por el Chaco. Luego, se sumaron Jujuy y Tierra del Fuego.
Durante sus más de tres décadas de historia, la OFEPHI tuvo una trayectoria sinuosa, con períodos en los que pudo desarrollar una acción común para impulsar los intereses de sus representados y otros en los que algunos gobernadores presentaron sus demandas en forma individual o confiaron en su cercanía al poder de turno para obtener prebendas.
“La última muestra de unidad fue con la confección de la reforma de la Ley Nacional de Hidrocarburos, en 2014. En aquel momento se plantaron ante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner e iniciaron un proceso de negociación que terminó en la nueva legislación que regula a los no convencionales y les da beneficios impositivos a los proyectos complejos como offshore, terciarios y crudos pesados” (El Patagónico, Santa Cruz, 27/6/2016).
“En un informe institucional de julio de 1991 la OFEPHI ofreció una síntesis de su desempeño durante sus primeros años de existencia. El documento aludía a la reivindicación de la propiedad provincial del subsuelo como "principio irrenunciable", a la necesidad de contar con sistemas de liquidación de regalías seguros y dignos de confianza, y de participar en los Entes estatales y empresas del Estado vinculadas con el sector, entre otros tópicos”.
El balance consideró que “uno de los principales servicios de la OFEPHI a sus miembros fue con los juicios contra el Estado nacional por deficiencias en la liquidación de regalías”. Cuando asumió “el rol de coordinador en los arreglos extrajudiciales que concluyó en el reconocimiento de parte del Estado nacional de una deuda a favor de las provincias productoras que fue del orden de los U$S 3.200 millones más ajustes e intereses”.
