os casos de un hombre de 51 años y otro de 31 involucrados en hechos de violencia sucedidos en la vía pública, a raíz de discusiones con sus respectivas parejas, fueron atendidos por la Justicia mediante el régimen de flagrancia, informaron fuentes oficiales.
Uno de ellos ocurrió el pasado 1 de mayo alrededor de las 23, cuando el hombre de 51 años fue detenido luego de agredir a un efectivo policial en la puerta de la vivienda de su ex pareja.
Al parecer el imputado tenía una orden de restricción para acercarse a la casa que venció ese mismo día, por lo que pretendió ingresar a la vivienda y la mujer hizo la denuncia ante la Comisaría de Género.
A raíz de ello, el Juzgado de Familia y Minoridad le ordenó al hombre el cumplimiento de pautas de conducta, pese a lo cual volvió al domicilio “e intentó ingresar por la fuerza, por lo que terminó provocando daños en la puerta de la vivienda”, según se desprende de las actuaciones policiales.
A los pocos minutos, cuando un patrullero se trasladó al lugar, el sujeto fue detenido y “tras mostrarse alterado y agresivo” terminó “insultando y golpeando en el rostro a un cabo de la policía que intentaba sujetarlo”.
Como consecuencia quedó involucrado en una causa por los delitos de “atentado y resistencia a la autoridad y lesiones, en perjuicio de un efectivo de la fuerza de seguridad”.
Durante la Audiencia Única celebrada el jueves pasado en el edificio de tribunales de Ushuaia, el Defensor Público del imputado, Juan Carlos Núñez, solicitó la excarcelación de su defendido y el traslado de la causa al Centro de Mediación, aunque el Fiscal de turno, Eduardo Urquiza, “le impuso reglas de conducta y anunció la elevación a juicio de la causa”.
“Entre las reglas impuestas por la Fiscalía se destacan, la presencia del imputado una vez a la semana en una comisaría de la ciudad, que no cometa nuevos hechos delictivos y que cumpla con las pautas de conducta consignadas por el Juzgado de Familia y Minoridad”, detalló un comunicado judicial.
El otro caso
Por su parte, el hombre de 31 años discutió con su pareja el pasado viernes a la noche y terminó rompiendo de un piedrazo el ventanal de la casa de un amigo donde se encontraba en ese momento la mujer, ya el sábado a la madrugada.
Según informó la Justicia, el sujeto que “de acuerdo al test de alcoholemia tenía 1.37 gramos de alcohol en sangre”, también participó de la Audiencia Única para delitos de flagrancia (realizada el sábado) donde el defensor Nuñez solicitó elevar el caso a mediación y, subsidiariamente, pidió la probation (suspensión de juicio a prueba) para su defendido.
