l frigorífico de Río Grande encabeza la faena ovina de las unidades productivas similares de la región austral (cinco chilenas y cuatro argentinas), según la estadística publicada en la revista Menéndez Behety de este mes.
“La Compañía frigorífica argentina de Tierra del Fuego lideraba en la región el faenamiento de corderos frigorizados con 196.950, seguidos por los del Río Seco en 128.120 siendo el total regional de 465.245. En materia de capones frigorizados los 28.547 registrados la colocaban en el antepenúltimo lugar, sobre una producción regional de 191.449, lo que da muestra que de la región era Río Grande proveedora de carnes más finas para el consumo” (Oscar ‘Mingo’ Gutiérrez. Rastros en el Río. Diario El Sureño, 22/10/1995).
El informe publicado en el medio mencionado detallaba las faenas de los establecimientos de Magallanes, Patagonia y Tierra del Fuego. “Corresponden a Chile los datos de cinco frigoríficos: Puerto Sara, Río Seco, Puerto Bories, Puerto Natales y Tres Puentes; en tanto que a nuestro país los de Río Grande, Santa Cruz, San Julián y Río Gallegos. La cuota de carne exportada por los argentinos totalizaba las 10.093,81 toneladas, en tanto que las del país vecino país se registraban en 10.876,725. Las cifras del año anterior -1933- habían sido 11.995 y 13.751 respectivamente, lo que indica cierta merma”.
Este descenso de las exportaciones de carne ovina estaba basado en las cuotas establecidas por el Reino Unido, cuyo gobierno “habría sugerido a la República Argentina la conveniencia de reducir voluntariamente la exportación de carnes a aquel país”.
El país, durante la ‘Década Infame’ era considerado como un miembro no formal de ese imperio. Este vínculo de extrema dependencia fue convalidado en el denominado ‘pacto del coloniaje’, firmado –el 1° de mayo de 1833- por el vicepresidente argentino Julio Argentino Roca (hijo) y el representante británico Walter Runciman.
“Dichas reducciones, motivadas por los acuerdos de Ottawa, se han aplicado en su verdadero vigor y todo hacía esperar, por opiniones autorizadas que se han dado a conocer en el transcurso de estos últimos años, que cumplido el programa de reducciones volverían las cosas al estado en que se hallaban antes de celebrarse el acuerdo de Inglaterra con sus colonias y dominios” (op.cit.).
