Avión con 257 pasajeros se estrella contra una montaña antártica
EL 28 DE NOVIEMBRE DE 1979

Avión con 257 pasajeros se estrella contra una montaña antártica

28/11/2022
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ste día, un avión de Air New Zeland se estrella contra el monte Erebus en la isla Ross. En el interior del McDonnell Douglas DC-10-30 viajaban 237 pasajeros y 20 tripulantes, que perecieron en el siniestro.
La mayoría de las víctimas fueron neozelandeses, pero también hubo algunos estadounidenses, canadienses, japoneses y australianos.
Se trataban del denominado vuelo panorámico 901 que diariamente partía de Auckland, sobrevolaba la Antártida durante unas horas y regresaba sin mayores complicaciones.
Pero, “alrededor del mediodía, el piloto, Jim Collins, realizó dos grandes vueltas a través de las nubes para bajar el avión a aproximadamente 610 metros de altura y así poder ofrecer a sus pasajeros una mejor vista (...) siguiendo la misma trayectoria que en los vuelos anteriores, sobre el estrecho de McMurdo, no anticipaba ningún problema” (BBC News. Londres, 29/11/ 2019).
En un momento, los pilotos vieron la montaña justo delante de ellos. Sin tiempo para elevarla, seis segundos después, la aeronave se estrelló contra su ladera.
Los pasajeros estaban ocupados tomando fotografías a través de las ventanillas. “Muchas de estas fotos se encontraron más tarde entre los restos y pudieron ser reveladas”. Algunas tomadas momentos antes del siniestro.
La tragedia conmocionó a Nueva Zelanda y tuvo un impacto mundial. Generó innumerables polémicas, años de investigaciones y “un perverso juego de acusaciones cruzadas”.
Desde el principio, la aerolínea señaló a los pilotos como los responsables del accidente. A pesar de ello, “la opinión pública se movilizó, exigió explicaciones y logró que se abriera una Comisión Real de Investigación sobre lo ocurrido con el juez Peter Mahon, quien encabezó la investigación, llena de obstáculos y presiones, de la que se extrajo que el siniestro fue el resultado de una alteración de última hora en las coordenadas de ruta que, al no ser notificadas a la tripulación, dirigieron la aeronave contra el monte Erebus, un volcán de 3.794 metros de altura cercano a la base estadounidense de investigación McMurdo”.
Finalmente, cuarenta años después, la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, en nombre del Gobierno, pidió perdón por “la compañía, entonces en manos del Estado (…) que causó la pérdida de muchos seres queridos", y recalcó que "los pilotos no fueron responsables de esta tragedia" (op.cit.).

Autor : Bernardo Veksler
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