l menos tres vuelos que debían despegar hacia Tierra del Fuego ayer se vieron afectados luego de que los gremios aeronáuticos realizaran asambleas sorpresivas ayer en Buenos Aires para manifestarse en contra de las operaciones de las llamadas empresa "low cost" o de bajo costo.
Según la información suministrada ayer por ayer por la pagina oficial de Aeropuerto Argentina 2000, hacia Tierra del Fuego se cancelaron tres vuelos. Dos de ellos debían partir durante primeras horas de la mañana hacia Ushuaia y el restante tenía como destino la ciudad de Río Grande.
Cabe señalar que los aeropuertos y los vuelos nacionales e internacionales comenzaron a normalizar muy lentamente sus servicios por la tarde, luego de las cancelaciones y demoras de servicios vinculadas con las asambleas informativas de los trabajadores de cinco de los seis gremios aeronáuticos en el marco de un conflicto en reclamo de medidas de seguridad y en rechazo al ingreso en el mercado aerocomercial de las líneas "low cost".
En horas de la tarde se registraba muy poca actividad en el Aeropuerto Internacional Ingeniero Ambrosio Taravella. En la página de Aeropuertos Argentina 2000 se puede seguir el detalle del estado de cada vuelo.
Desde primera hora de ayer los trabajadores comenzaron a trasladarse -en el caso del Aeroparque Jorge Newbery- hacia el sector de cargas, para participar de una asamblea, lo que fue interpretado por los pasajeros y autoridades como una medida de fuerza.
En el mismo momento, se llevaba adelante en el Teatro de la Ribera la recepción de las ofertas por nuevas rutas áreas, en una audiencia pública.
No obstante, aunque no se trataba formalmente de una medida de fuerza, la participación de los trabajadores en las asambleas afectó directamente la normal prestación de los servicios, lo que derivó en la postergación y cancelación de vuelos.
Por su parte, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que preside la audiencia pública para distribución de nuevas rutas aéreas, cuestionó a los gremios al afirmar que, "en vez de festejar que estamos abriendo nuevas rutas y que va significar más trabajo para todos, no permiten en estos momentos que se pueda volar en Argentina, tomando como rehenes a miles de pasajeros que están varados en los aeropuertos".
En el caso del Aeroparque metropolitano, de la asamblea, que comenzó antes del mediodía, participó medio millar de trabajadores nucleados en la Unión Personal de Seguridad Aérea (UPSA), Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA); Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (Apta); Asociación del Personal Aeronáutico (APA); de UALA; controladores aéreos y personal de Aerolíneas Argentinas y de LAN.
