Después de 48 días de suspendida sus actividades

Pese a la adhesión al paro, el Jardín “Barquito Travieso” inició sus clases

04/10/2005
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nbsp;El Jardín "Barquito Travieso", donde asisten más de 300 niños de la ciudad de Ushuaia, retomó sus clases después de 48 días, debido a los serios inconvenientes en el sistema de calefacción. Pese a que ayer se normalizó la jornada, casi por unanimidad, los maestros en asamblea resolvieron adherirse al paro provincial. Esto implicó que el personal sacrifique un día de sueldo, en repudio a la represión que sufrieron los docentes en Río Grande, el pasado fin de semana.
En diálogo con el diario del Fin del Mundo, la directora del Jardín, Susana Zampa, explicó: "Tomamos esta medida loable, por respeto a los chicos y los padres", lo que también "es una muestra para aquellos que piensan que los docentes no piensan en los chicos, y sólo en sus intereses".
El jueves, la empresa Camuzzi Gas aprobó las instalaciones y el viernes se finalizaron los trabajos. Los docentes se mostraron conformes con las reparaciones, que durante varios días mantuvieron en vilo al personal de la institución, padres y niños, puesto que luego de 30 días de paralizadas las actividades y sin respuesta del Gobierno se vieron obligados a manifestarse frente a Casa de Gobierno. En esa ocasión y gracias a la presión realizada, el ministro de Obras Públicas, Eduardo Cóppola, y el secretario General, José Luis Ghiglione, a través de un acta acuerdo se comprometieron a destinar 120 mil pesos para concretar la obra.
Ayer la ansiedad de los chicos y las docentes transformó la jornada en un día fructífero. La directora precisó que "no habrá manera de recuperar el tiempo perdido, aunque los docentes decidieron hacer una adaptación de los proyectos planificados para este ciclo mediante la selección de contenidos para que los chicos puedan finalizar la etapa satisfactoriamente, para que no influya en la entrada de los chicos a EGB".

Refacciones que eran necesarias
 
Las mejoras edilicias consisten en el cambio del sistema de calefacción, puesto que se reemplazaron los antiguos calefactores y surray, por radiadores alimentados por un sistema de calderas. Susana Zampa se mostró conforme con las remodelaciones edilicias, sobre todo, con la labor de la empresa que llevó a cabo las acciones de manera responsable. Consideró que "no sólo se dedicó a las refacciones de la calefacción del edificio, sino que mejoraron las condiciones de una sala". Un pequeño cuatro donde se encontraba uno de los surray fue destinado a un nuevo gabinete, en el cual se dispusieron ventanas con luz natural, lo que mejorará este espacio de trabajo para los niños que asisten al jardín.