E
l secretario del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tierra del Fuego fue designado para actuar de juez subrogante en una causa por estupefaciente e interpuso una excusación al plantear que no existe ley de subrogancia que ampare esta situación que podría generar planteos de nulidad en el proceso.
El caso se dio con el secretario del Tribunal Federal, doctor Cristian Vergara Vago, quien fue designado por los jueces de juicio –sus superiores– para que haga de juez en la causa "Saldivia Luis Marcelo sobre infracción a la ley 23.737". En un fundado escrito de excusación el secretario señala que ha recogido opiniones de personas alejadas del ámbito jurídico, como docentes, carpintero, médico, albañil, "sobre las garantías que les ofrecía la posibilidad de ser juzgados por personas que no contaban con diploma de juez expedido por el Poder del Estado constitucionalmente habilitado para ello". El interesante planteo con participación ciudadana, implicó una explicación técnica, como por ejemplo que la comisión de selección, "es de elección y no de designación, quedando la designación del elegido reservada al acto administrativo que deberá dictar el propio tribunal proponente". Consideró de acuerdo a las respuestas recabadas que los jueces designados mediante este sistema no brinda demasiadas garantías a quien va ser sometido a juicio.
Además el funcionario consideró que "el juez es depositario de la confianza de la sociedad, y por consiguiente sus decisiones deben de alguna manera refractar y reflejar la opinión del medio social en que ha de juzgar. Su tarea es amparar al ciudadano de excesos y de arbitrariedades de la administración, controlar la constitucionalidad de la ley a fin de hacer prevalecer el principio de legalidad".
En el escrito dio a conocer que la ley 25.876 que regulaba el sistema de subrogancia fue dejada sin efecto y quedó un vacío legal. Pese a ello desde el Consejo de la Magistratura de la Nación se interpreta que en términos generales cualquiera que tenga título de abogado puede desempeñarse como juez subrogante. Obviamente Vergara Vago considera –al igual que tantos hombres del derecho– que con esta situación no se cumplen los derechos de los enjuiciados a tener un juez natural, imparcial e independiente.
Por otra parte hay que determinar una aparente "sobrecarga de tareas" dado que además de ser secretario del tribunal, también debe ser juez subrogante. Por ello consideró que existiendo jueces naturales en primera instancia, tanto de Ushuaia como de Río Grande, serían "los funcionarios naturalmente llamados a subrogar como jueces".
Vergara Vago señaló que "...el resguardo de la real independencia de criterio que debe ser no solo garantizada, sino que además debe ser percibida objetivamente por la persona que ha de ser juzgada, en cuanto a que su juzgador se encuentre libre de todo condicionamiento actual o futuro respecto de las decisiones que adopte". Esa condición "... no ha de ser satisfecha con la actuación de un juez subrogante propuesto y designado por los propios jueces del Tribunal a subrogar".
