Dos de sus hijos habian sido acuchillados por una patota

Madre reclama agilización de una causa judicial

20/03/2007
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na mujer reclamó a la justicia que acelere la causa en la que se investiga la salvaje agresión sufrida por dos de sus hijos, quienes fueron heridos mortalmente con un arma blanca por una patota la noche del 28 de enero en el barrio 96 Viviendas.
Claudia Lechuga dijo que "a pesar de que todos los agresores están plenamente identificados, ni siquiera han enviado las pruebas que se encontraron a Buenos Aires, para que se realicen las pericias correspondientes". La mujer madre de los jóvenes agredidos explicó que "porque yo me empecé a mover, y fui a averiguar sobre el avance de la causa, en el Juzgado a cargo del doctor Javier De Gamas Soler, recién decidieron realizar las acciones que debieron haber hecho apenas se produjo la agresión a mis hijos; como, por ejemplo, el ADN a mis hijos para comparar las muestras".
Lechuga lamentó que "ninguno de los integrantes de esa patota esté detenido, a pesar de que se le encontraron en sus casas las pruebas de haber participado de la agresión, e inclusive sé que han salido de vacaciones afuera de la Isla, y que por lo menos uno se encuentra en este momento en Córdoba".
En cuanto al hecho en que resultaron heridos dos de sus hijos y otro menor de 16 años, la mujer señaló que fue en las inmediaciones de la Tira 2 del barrio 96 Viviendas, y recordó que "todo comenzó cuando un grupo de chicos estaba agrediendo a un pibe de 16 años, afuera de mi casa; y mi hijo de 19 salió a separarlos porque la persona que estaba siendo golpeada era un vecino nuestro". "Pero mi hijo quedó en el medio de toda esta gente, que al comienzo eran y 5 y luego fueron 15, y fue apuñalado en el estómago, la espalda y la cabeza", prosiguió en su relato, para agregar que fue en ese momento "que llegó mi otro hijo, de jugar a la pelota, e intervino; pero también fue lastimado y estuvo 5 días en el hospital".
Tras señalar que el hijo de 19 "tuvo dos cortes en el estómago, uno en el duodeno, una puñalada en la espalda y otra en la cabeza", Lechuga indicó que debió permanecer internado en el hospital por más un mes", para anotar que "ahora está en el período de post operatorio".
Como resultado de la situación enunciada, dijo, "mi hijo perdió su trabajo en una agencia", porque "los médicos le indicaron que no haga fuerza por un buen tiempo, para que no se le abran nuevamente las heridas que le hicieron".
Lechuga adelantó que "yo no voy a dejar las cosas así, sino que voy a seguir luchando hasta que se haga justicia, porque a nosotros este hecho nos destruyó como familia".