l turismo de Semana Santa en Ushuaia se mantuvo en los mismos niveles del año pasado. La Cámara de Turismo de la capital provincial estimó un promedio de ocupación hotelera del 50%. El fin de semana largo fue el cierre de la temporada alta de turismo. Marca además el inicio de una temporada baja sombría para el destino Ushuaia.
El pasado 31 de marzo la línea área Lan Argentina dejó de volar a Ushuaia. Se estima que retomará sus operación a la capital fueguina recién en octubre cuando se inicie la temporada 2008. La empresa había abierto la posibilidad de mantener sus frecuencias durante todo 2007 de prosperar la compra de dos nuevas aeronaves que le permitan ubicar el destino Ushuaia como ciudad de arribos permanentes durante todo el año. Pese a ello, por cuestiones de rentabilidad la compañía resolvió abortar el proyecto.
Otra de las firmas que abandonó sus vuelos a Tierra del Fuego fue Lan Chile. Su último vuelo partió el pasado sábado hacia Santiago desde Ushuaia.
Por otra parte, se conoció extraoficialmente que Aerolíneas Argentinas volverá a reducir en su máxima expresión la cantidad de frecuencias a Ushuaia durante esta temporada baja. Es por eso que se estima que en mayo sólo habrá disponibles tres frecuencias diarias, dos en junio y tres en julio pasado. Eso echaría por tierra la posibilidad de que durante el invierno se mantengan 6 vuelos diarios.
El presidente de la Cámara de Turismo de Ushuaia, Miguel Ramírez, aseguró que durante Semana Santa se divisó un intenso movimiento de turistas provenientes de Río Grande. Situación similar, explicó, se vivió en la comuna de Tolhuin en donde las cabañas registraron una ocupación del 100%.
Pese a ello, el titular de la Cámara aseguró que el movimiento no colmó las expectativas del sector, que aguardaba superar los niveles de visitas del año pasado. "El ingreso de visitantes se volvió a acotar por la falta de vuelos y vuelos compartidos", resaltó Ramírez.
El nivel de ocupación en Ushuaia se contrastó con los buenos guarismos que arrojaron otros destinos turísticos del país como Iguazú, Mar del Plata, Córdoba y toda la Costa Atlántica. Un ejemplo claro del buen nivel de ocupación lo arrojó Santa Cruz. Un sondeo realizado desde la Secretaría de Turismo de esa provincia arrojó una ocupación promedio entre 80 y 82 por ciento, tanto para la hotelería de alta categoría como para albergues o cabañas.
Por su parte, el Aeropuerto Internacional de El Calafate estuvo funcionando las 24 horas, para albergar vuelos que llegaron fuera de la programación habitual, algunos regulares y otros chárter, que totalizaron de 10 a 11 por día.
El Partido de la Costa registró un nivel de 75 por ciento en los hoteles de cuatro estrellas. En la provincia de Córdoba, Villa Carlos Paz tuvo plena ocupación, en tanto que mientras que en Villa General Belgrano y el Valle de Calamuchita alcanzó el 90 por ciento. En la región litoral, la más castigada por las lluvias e inundaciones, la ciudad de Colón registró plena ocupación de sus hoteles y 85 por ciento en bungalows y departamentos.
