l coordinador regional del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Robert Erath, visitó Tierra del Fuego durante el fin de semana, para tomar contacto con las autoridades de la Dirección de Recursos Hídricos de la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Ambiente de la Provincia, y conocer los trabajos que se realizan con el aporte del GEF (Fondo Mundial para el Medio Ambiente).
Son dos los proyectos que se desarrollan en la Provincia, de 19 que se implementaron en el país, financiados por unos tres años. Hace poco menos de un año que se han puesto en marcha, y en este caso están relacionados al monitoreo de los glaciares cercanos a Ushuaia, afectados por el cambio climático; y a un plan que se pretende implementar para el uso de la cuenca del río Grande
En ese sentido, la directora de Recursos Hídricos, Adriana Urciuolo, recordó que se recorrió un largo proceso hasta ser definitivamente seleccionados para recibir esos fondos, "fue un año de trabajo, donde se debieron superar dos rondas de selección", indicando que en la primera etapa se presentaron 400 proyectos para ser beneficiados por este programa descentralizado de medianas donaciones de GEF en Argentina; de esos se eligieron 60, entre los que había 4 de la entonces Subsecretaría de Recursos Naturales. Finalmente quedaron las dos de la Dirección de Recursos Hídricos.
El relacionado al río Grande, Urciuolo explicó que el mismo "se desarrolla en el marco del 'Plan Binacional de la Cuenca del río Grande', que es una cuenca priorizada entre Argentina y Chile para hacer un plan de uso como una experiencia piloto", de muchas otras cuencas que hay compartidas a lo largo de toda la frontera, por lo tanto "ambos países decidieron establecer un modo de manejarlas, para evitar conflictos futuros, en función de lo establecido por el Tratado del Medio Ambiente".
Por su parte, el jefe del Departamento Cuencas Hídricas, Rodolfo Iturraspe, explicó que el otro proyecto establece un monitoreo, principalmente, de los glaciares Martial y Vinciguerra, y "de todos los glaciares de la Provincia que tienen vinculación con las fuentes de agua para la ciudad, que es su principal usuario".
En ese sentido, señaló que el proyecto "implica estudiar que está ocurriendo con los glaciares, como reaccionan ante la variabilidad climática, a su vez tenemos un contexto de lo que está ocurriendo con el clima y tener una proyección de cómo se van a modificar los cursos de agua en cuanto a su régimen, a partir de la reducción notoria o desaparición de los glaciares". De ese modo, manifestó que esto "tiene que ver con una estrategia de adaptación que hay que tener ante esos cambios que van a venir y que fundamentalmente tienen que ser abordados desde el punto de vista de la planificación de los recursos hídricos, de un plan de utilización a futuro", y eventualmente de obras estructurales para provisión del agua potable.
Tomar contacto directo con los proyectos y sus responsables
Así, Robert Erath señaló que esta visita busca tomar contacto personal con los responsables de la implementación de los proyectos y el conocer los trabajos que se han desarrollado hasta el momento. Aclaró que "éste es un mecanismo que pretende agilizar proyectos de mediana escala", agregando que son tres agencias implementadoras del GEF: el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Banco Mundial; y acotó que de los 19 proyectos que se implementan en la Argentina 7 están bajo la órbita del PNUMA.
Sostuvo que los dos proyectos fueguinos "aún no los habíamos visitado", comentando también que "hace poco asumí el cargo y vine hasta la Argentina para visitar los siete proyectos que tenemos en formulación y ya en ejecución, de los cuales 3 son estos de mediana escala".
Manifestó que el PNUMA "está reformulándose como una estrategia de medio término, de los cuales el cambio climático es uno de los seis puntos focales principales, y este tema nos ocupa mucho y por eso le estamos dando mucha importancia". Por eso, subrayó que "el hecho de venir en persona implica que, más allá de los contactos diarios que podamos tener vía mail o teléfono, queremos conocer la realidad", refiriéndose a las condiciones climáticas y al desarrollo de los trabajos que se han llevado a cabo en el marco de los proyectos.
Insistió que esto se suma al sistema de reportes físicos y financieros que se realizan a lo largo del año, los cuales "son una manera que las Naciones Unidas tienen para estar seguros de que se está en curso hacia los objetivos y para apoyar si hubiera alguna dificultad".
