E
l Club Andino Ushuaia desplegó una capacitación docente de escalada deportiva orientada a diversos profesores de educación física que prestan servicio en el Polideportivo Municipal, docentes comprometidos con el sistema de escuelas experimentales y a ellos se les sumó el plantel del Centro Hípico Fin del Mundo, que desde el 2008 mantienen actividades en la palestra situada en el lugar.
Según lo expuesto por la entidad deportiva, el evento constó de dos series de encuentros de seis días en la palestra del CAU en el Polideportivo Municipal, adicionando una salida final a la roca.
La primera serie se desplegó entre el 9 y el 17 de diciembre, estuvo orientada a acercar a los futuros formadores al deporte, haciéndolos partícipes de una experiencia directa con la escalada en su modalidad conocida como "bloque" o escalada sin cuerda a baja altura.
Esta modalidad reúne todas las particularidades técnicas de la escalada deportiva, como ser la dificultad, la diversión y la interacción con el medio natural, teniendo además la ventaja de no imponer el uso de equipo de seguridad de elevado costo. De esta manera se simplifica la escalada, facilitando el acceso de más participantes.
Durante esta primera etapa, a su vez, se complementó la experiencia con momentos teóricos referidos a aspectos que conforman la práctica de este deporte. Algunos de los puntos abordados fueron técnicas de escalada, lesiones y prevención de las mismas, calentamientos y estiramientos, entre otros.
La propuesta para la segunda serie, que se llevó adelante entre los días 23 de febrero y 8 de marzo, partió de la experiencia tenida en diciembre para ahondar en los aspectos pedagógicos y organizativos a tener en cuenta al momento de plantear una iniciación en escalada deportiva.
Vale destacar que los cursantes debieron asumir el rol de coordinadores de la actividad, desarrollando las diferentes acciones a seguir y dictando, como cierre, una clase a un grupo de niños invitados.
El último encuentro fue una salida a la Piedra Barco, bloque ubicado cerca de la ciudad y que es muy conocido para todos los escaladores locales. Se trató de una vivencia directa con la escalada de bloque en roca, y una salida para compartir lo mejor que tiene esta actividad, que es el disfrutar de la naturaleza.
Desde todo punto de vista, el balance es altamente positivo. El CAU viene intentando desde hace años ampliar el universo de la escalada en la ciudad, partiendo sobre todo desde las bases que son los más pequeños. Para que ello fuera posible sin las restricciones que se desprenden del aspecto económico, era indispensable la participación del Estado. Es por ello que la posibilidad, ahora cierta, de que la escalada se convierta en una opción en la escuela, además de ser un hecho inédito en la Argentina.
Indudablemente, este suceso abre la puerta para que el deporte vaya dejando de lado varios perjuicios y se convierta en una opción posible para todos los niños que hayan nacido en una ciudad con características geográficas similares a las que contamos en nuestra ciudad.
