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a Fundación Alemana de Tierra del Fuego llevó adelante este fin de semana el evento denominado “La Memoria del Fin del Mundo”, con motivo de conmemorarse los 50 años de la gestión del gobernador Ernesto Campos en la provincia, de la llegada de la primera Expedición Aérea Argentina al Polo Sur y de la llegada del Primer Instructor Aéreo del Aeroclub Ushuaia.
Las actividades dieron inicio el jueves pasado, con la llegada de la comitiva de invitados; y continuaron el viernes 9 con un acto que se llevó adelante a partir de las 15 horas frente al DC 3, en el Aeroclub Ushuaia, con un discurso referente a la expedición al Polo Sur, presentación a miembros de la tripulación, discursos varios y recuerdo de antiguos pobladores, con la participación de la Banda de la Armada.
A las 20 horas se realizó una misa en Memoria a los 50 años en la Antigua Iglesia Don Bosco, sobre la calle Maipú, y a las 21 una disertación a cargo de invitados, con entrega de presentes, en el Museo Marítimo (ex panadería).
El evento finalizó el sábado 10 de diciembre. A las 11:30 horas, en la antigua Residencia de Gobierno, se inauguraron las muestras en conmemoración de los 50 años de la gestión del Gobernador Ernesto Campos, su vida, obras, familia y amigos, y las correspondientes a los 50 años transcurridos desde la expedición al Polo Sur; y posteriormente se realizó un almuerzo en el quincho del Aeroclub Ushuaia.
En diálogo con EDFM, el presidente de la Fundación Alemana de Tierra del Fuego, Rafael Fank, destacó en primer lugar el acompañamiento de la comunidad durante el homenaje a quienes protagonizaron los tres acontecimientos recordados en la ocasión, y las empresas que se sumaron a la organización del evento; junto a entes como la Cámara de Comercio, la Cámara de Turismo y Hotelera, la Agencia de Desarrollo Ushuaia, los museos, el InFueTur, la Secretaría de Turismo, el Aeroclub Ushuaia, el Concejo Deliberante de Ushuaia, el AFASyN y la Universidad Nacional de la Patagonia, entre otros.
“Cuando propusimos convocar a toda la comunidad para el evento, todos estuvieron de acuerdo en colaborar para poder llevar adelante este reconocimiento”, sostuvo Fank, y en referencia al recuerdo de los tripulantes de los dos aviones C–47 de la Armada que llegaron al Polo Sur el 6 de enero de 1962, durante la Primera Expedición Aérea argentina al sector. “Para ellos fue un simple vuelo, no una hazaña o aventura, y su visión de este acontecimiento es muy humilde”, afirmó, al recordar que se trató del cuarto país en llegar al Polo. “Ushuaia, la capital de Tierra del Fuego, fue el único lugar de la Argentina en reconocerlos de esta manera”, señaló.
La Expedición al Polo Sur
La aventura surgió a partir del requerimiento del Comando del Grupo Naval Antártico, que requería información aerofotográfica y científica de la zona sur de Ellsworth y Belgrano hasta la máxima latitud posible, que sirviera de apoyo a las navegaciones glaciológicas realizadas en aquella zona por el rompehielos A.R.A. “Gral. San Martín”, por lo que en el mes de agosto de 1961 se aprobó el alistamiento de dos aviones C–47 para intentar un vuelo al Polo Sur.
El 5 de diciembre de ese año los aviones Douglas DC–3 versión C–47 (CTA–15 y CTA–12) despegaron desde la Base Aeronaval Ezeiza con destino a Río Gallegos, y el 18, cuando se presentaron las condiciones meteorológicas adecuadas, cruzaron a la Antártida aterrizando en la Estación Aeronaval Capitán Campbell en proximidades de la Base Matienzo de la Fuerza Aérea Argentina.
Posteriormente, el 26 de diciembre, decolaron con destino a la Estación Científica Ellsworth cubriendo el trayecto en 9 horas de vuelo y, finalmente, el 6 de enero de 1962 decolaron hacia la Base Amundsen Scott en el Polo Sur Geográfico donde aterrizaron a las 21:10 horas, luego de 8 horas de vuelo. Allí se descubrió una placa de homenaje que rezaba: “La República Argentina a Amundsen, Scott y sus hombres en el cincuentenario de su llegada al Polo Sur. Homenaje de la Aviación Naval de la Armada Argentina en su primer vuelo al Polo Sur”.
El 7 de enero ambos aviones emprendieron el regreso haciendo el recorrido inverso; aunque las condiciones meteorológicas para abandonar la Antártida no surgieron hasta el 20 de enero. Finalmente, los doce tripulantes aterrizaron el 22 de enero en el Aeroparque Jorge Newbery, convirtiéndose en los protagonistas de la experiencia que sólo había sido alcanzada por Noruega, Gran Bretaña y Estados Unidos.
Héctor Martini, piloto de uno de los aviones protagonistas de la hazaña, señaló que el homenaje realizado durante los tres días que duró este evento, fue un regalo que los tripulantes recibieron con agrado. “Ushuaia tiene un gran significado para nosotros, venir aquí es venir a recordar muchas experiencias vividas hace 50 años”, sostuvo.
En tal sentido, afirmó que se trató de un encuentro entre amigos y nuevos conocidos, que se convertirá en un recuerdo importante para sus familiares. “Todos estamos retirados de la Fuerza, y la mayoría somos de Buenos Aires así que nos vemos de vez en cuando”, explicó, aunque participar de este reconocimiento “lo disfrutamos desde el lugar de agasajados, recordando lo que vivimos y lo que significó para todos los argentinos”.
Respecto a la expedición, Martini aseguró que no se trató de una aventura, sino una misión encomendada desde las autoridades del sector militar. “Como toda misión, estudiamos las cuestiones a favor y buscamos las soluciones a las cuestiones adversas, y tuvimos la tranquilidad para esperar el momento indicado; por eso nos llevó más de un mes entre que salimos de Buenos Aires y volvimos”, señaló, y destacó que los aviones “estaban tan bien preparados, que no tuvimos inconvenientes técnicos de ningún tipo”.
Finalmente, reflexionó sobre el acontecimiento, al afirmar que “haber llegado a nuestro objetivo y saber que éramos los primeros, fue una sensación muy gratificante”, y recordó: “en el momento en que la vimos flamear ahí supimos que nos tocó llevarla, pero representábamos a todo el país y eso nos sigue llenando de orgullo”.
Homenaje a la gestión de Ernesto Campos
Desde la organización de “La Memoria del Fin del Mundo”, Rafael Fank se refirió además al homenaje a los 50 años de la gestión del gobernador Ernesto Campos, durante la cual ocurrieron los acontecimientos recordados el último fin de semana.
“Lamentablemente la gente no conoce mucho de su gestión; su obra en salud, cultura, educación, y cómo buscaba la perfección para todos los ámbitos”, evaluó, y enumeró entre sus logros la representación de las unidades vecinales en el ámbito democrático; la delegación del gobierno de Tierra del Fuego en la Antártida y la integración de la Provincia con la población de las Islas Malvinas.
“Alcanzó una penetración real y efectiva en las Islas; llevó a LADE como línea aérea, instaló depósitos de combustible, gestionó becas en Buenos Aires para estudiantes de Malvinas y el traslado de enfermos a Comodoro Rivadavia”, recordó, y agregó que a su entender, la gestión de Campos significó “un antes y un después para la provincia de Tierra del Fuego”, ya que el ex gobernador “ha pensado en grande y alcanzado muchos de sus objetivos, que cambiaron la Provincia”.
Por último, el presidente de la Fundación Alemana de Tierra del Fuego celebró el éxito en el evento que conmemoró los 50 años de tres acontecimientos importantes para la Provincia, y afirmó que “los homenajeados se vieron reconocidos; y pudimos transmitirles esta sensación tan gratificante de distinción y admiración”. “Ellos nos mostraron gran humildad, lo que los hace aún más grandes”, concluyó.
