P
or unanimidad, el Concejo Deliberante de Río Grande aprobó la remisión de un pedido de informes al Senado de la Nación, para determinar si la edil Laura Colazo siguió revistando en la planta política de la Cámara alta del Congreso –como asesora de su padre, el actual senador y destituido gobernador Jorge Colazo– tras asumir su banca en el cuerpo deliberativo de la ciudad del norte provincial.
En el marco de un clima político tenso, la denuncia contra la concejal motivó que sus pares impulsen un proyecto de resolución al que Colazo acompañó.
Según consignó el portal de noticias Actualidad TDF, “el cuerpo de concejales decidió aprobar un pedido de informes a ese órgano (por el Senado) para clarificar la situación, y la propia Colazo prometió documentos respaldando su baja con anterioridad”.
Pero, además, la hija de Colazo “dejó un pedido para la polémica” consignó el medio electrónico, ya que solicitó “que se investiguen también a otros concejales que se quedan con un porcentaje del sueldo de sus empleados”.
El proyecto de resolución fue presentando por los bloques del MPF, PJ, UCR y FPV. En el mismo “se pide a la Honorable Cámara de Senadores de la Nación que informe al Concejo Deliberante sobre la situación laboral de la hoy concejal Laura Colazo, del 10 de diciembre pasado en adelante, a fin de determinar si hubo una superposición entre su labor como asesora de su padre, el senador Jorge Colazo, y el cargo que ostenta como concejal electa por la ciudad de Río Grande”.
Colazo “prometió documentación respaldatoria de su baja ‘en tiempo y forma’”, y argumentó en la sesión estar “a la espera de que esos papeles sean remitidos en original desde el Congreso”.
