T
ras confirmarse la muerte cerebral del joven agente policial que se disparó el domingo un tiro en la cabeza por problemas sentimentales, la familia decidió donar sus órganos, que serán trasplantados en las próximas horas a un paciente que se encuentra en estado crítico en Buenos Aires.
Increíblemente, posterior al operativo de ablación, por un descuido, los profesionales médicos olvidaron en una ambulancia una serie de órganos que debían ser trasladados a Buenos Aires.
El operativo de ablación comprendió los riñones, el hígado y el corazón, y los órganos se destinaron a las clínicas Fleni y Favaloro de la Capital Federal, donde se hallaban las personas a la espera de un donante.
Minutos después de las 7 de la mañana personal policial de y tránsito municipal realizó un “cordón sanitario” que comprendió el corte de varias calles para que quedara liberado para el tránsito rápido de las ambulancias desde el Aeropuerto al Hospital Regional Río Grande.
Sin embargo en la última ambulancia donde eran trasladados más órganos, autoridades sanitarias dejaron olvidados el bazo y los riñones.
No hubo indicios de lo que hizo
En tanto, respecto a la decisión del joven efectivo de la policía de quitarse la vida, el jefe de Policía Comisario Nelson Moreira manifestó que “es un hecho que nos enluta como institución, es muy duro de absorber desde lo institucional y lo grupal” y sobre la víctima apuntó que “era una persona muy joven que tenía una relación sentimental con una funcionaria policial. Venía de una serie de discusiones en locales nocturnos de la ciudad, y terminó tomando la decisión que tomó”.
En tanto, en diálogo con FM Provincia El jefe de policía explicó que Henke Oyarzo “hace alrededor de un año que prestaba servicio en una comisaría”, y lo definió como “un funcionario ejemplar que nunca tuvo inconvenientes, y nunca solicitó la baja ni lo intentó”.
“Si tenemos algún caso de un agente que sufra un bajón (anímico) de esta naturaleza tenemos un área específica con profesionales que toman cartas en el asunto en forma inmediata”, agregó Moreira, y anticipó que dentro de la institución se analizará lo sucedido y los pasos a seguir a partir de este hecho.
Asimismo “descarto de plano” que haya habido algún indicio de la decisión que iba a tomar Henke Oyarzo, y en ese sentido aseveró que “fue motivado por una relación sentimental en la que no tenemos mayor injerencia”.
Operativo de ablación
Sorprendente: olvidaron órganos en una de las ambulancias
El tanto el portal de noticias ActualidadTDF de Río Grande confirmó que este lunes autoridades sanitarias olvidaron en la última ambulancia dos cajas con órganos que debían viajar para ser trasplantados.
Al parecer el inconveniente se registró en la tercera y última ambulancia que salió del Hospital Regional con destino al aeropuerto Río Grande, donde esperaba la segunda aeronave sanitaria que retorna a Buenos Aires con el segundo equipo médico.
Este equipo culminó la segunda etapa de la ablación de órganos con la extracción de aquellos que poseen una capacidad de sobrevida fuera del cuerpo de muchas más horas. Realizado el transbordo en la pista del aeropuerto se produjo el despegue de la nave con el equipo médico y parte del valioso cargamento.
La ambulancia retornaba al Hospital Regional con su chofer y un enfermero, los cuales desde los asientos delanteros al mirar hacia el furgón observaron con asombro que dos cajas térmicas aún estaban en el lugar, con los logos del Incucai y la clara descripción de su contenido; el bazo y los riñones.
Inmediatamente se dio el alerta pero el piloto de la aeronave sanitaria se negó a retornar a pista, por lo que desde el Hospital Regional ya dispusieron de una ambulancia para viajar a la ciudad de Ushuaia con el cargamento “olvidado”.
Tanto el bazo como los riñones serán llevados al Hospital Regional Ushuaia para ser dejados en una conservadora, a fin de poder ser puestos en el próximo vuelo de línea hacia Buenos Aires, dado que el bazo y los riñones tienen la posibilidad de ser trasplantados solamente dentro de las próximas 24 horas. |
