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a firma de capitales chinos Ambassador debió paralizar su producción por la falta de insumos ocasionada por las demoras que se vienen registrando en la aprobación por parte de la AFIP de las declaraciones juradas anticipadas de importación (DJAI), que la empresa debe tramitar indefectiblemente para poder ingresar mercaderías desde el exterior, en este caso concreto insumos básicos e indispensables para elaboración de televisores LED.
La suspensión de la actividad rige desde la semana pasada y se extenderá hasta fines de la próxima, siempre y cuando para ese entonces ya se cuente en planta con la materia prima necesaria para poner en marcha las líneas de producción.
Para evitar que esta paralización por falta de insumos repercuta negativamente sobre los 170 operarios de la empresa, se acordó con el sindicato metalúrgico de Ushuaia que los trabajadores perciban con normalidad el total de sus haberes, y una vez reiniciada la producción devolver a la empresa parte de las horas no trabajadas. Marcelo Castronuovo, secretario administrativo de la entidad sindical, precisó que el mecanismo adoptado –al que denominan banco de horas– posibilita que “a la totalidad de los compañeros conservar el puesto de trabajo, que siga cobrando su sueldo normalmente y luego devolver las horas o parte de ellas, porque siempre se devuelve un porcentaje menor de las horas que se pierden” precisó.
El dirigente metalúrgico sostuvo que a lo largo del año varias fueron las empresas que afrontaron inconvenientes en el abastecimiento de los insumos provenientes de Asia, aún cuando ello no haya derivado en la paralización de la producción. Explicó que “algunas empresas pueden sobrellevar mejor esa situación porque producen distintos tipos de productos electrónicos, entonces quizás no le llegan los materiales para hacer TV pero pueden hacer celulares. Es decir, hay otras alternativas para poder seguir produciendo. Pero hay empresas como Ambassador que fabrican un sólo producto, televisores LED, que están más complicadas” ya que si no reciben esos insumos se ven impedidas de seguir produciendo.
Habida cuenta las restricciones que existen en el país en materia de giro de divisas al exterior, la demora en la tramitación de las DJAI más cierto enfriamiento del consumo de bienes suntuarios, se consultó a Castronuovo cómo se vislumbra desde la UOM que evolucionará hasta fin de año la situación de la industria, y en particular el empleo fabril.
Si bien reconoció que la conjunción de los factores mencionados plantea un panorama complejo, se mostró confiado en poder transitar esa coyuntura sin mayores dificultades, ya que dijo que “hay mucha gente que está comprometida y pretende tratar de sostener esto, tanto gremios como empresas y gobierno nacional”.
Señaló que tal vez en Río Grande pueda vivirse una situación más compleja. “El problema más grave es en Río Grande, con las autopartistas que están más complicadas” producto de paralización que se está dando en varias automotrices. De todas maneras dijo que son optimistas. “Creemos que se va a reactivar con las últimas medidas del gobierno nacional en cuanto a los créditos que está ofreciendo a través del Banco Nación”, apuntó.
Es más, precisó que la industria radicada en Ushuaia emplea en la actualidad entre 2800 a 3000 trabajadores. “Sostenemos prácticamente los puestos del año anterior, podremos estar abajo en 100 operarios, nada más”, incluso mencionó que “a principios de esta semana ingresaron algunos compañeros a New San”.