Reacción del gremio docente, que anunció medidas de fuerza para hoy en toda la provincia
L
a última sesión ordinaria del año tuvo un cierre por demás sorpresivo, ya que los legisladores aprobaron una importante cantidad de proyectos de ley, la mayoría de los cuales no contaban con dictamen de comisión y no integraban el orden del día original. Entre ellos, la ley de Educación; una reforma a la ley tributaria para reducir del 1,50% al 1,10% la alícuota de la tasa de verificación de procesos productivos a la industria electrónica y a la autopartista; la que creó un Fondo Social de asistencia económica para trabajadores de la construcción; la del régimen de acogimiento de menores en riesgo, la de atención integral a las víctimas de violencia de género y el nuevo régimen de contrataciones del Estado.
También obtuvieron el visto bueno de los parlamentarios la ley de Presupuesto y la de creación del Procurador Penitenciario que estaban dentro de los temas previstos abordar en la sesión de ayer. Otro tanto ocurrió con el Código Contravencional. Si bien no había en principio muchas chances de que el asunto que hacia casi un año aguardaba definición fuera tratado, acuerdos de última hora habilitaron su sanción con la única negativa del justicialista Eduardo Barrientos.
La gran sorpresa
Innegable resulta señalar que la gran sorpresa de ayer la constituyó la decisión mayoritaria de la Legislatura de habilitar el tratamiento sobre tablas del proyecto de ley de Educación. Como el asunto carecía de dictamen de comisión, para que la moción formulada por la legisladora Rojo prosperara resultaba necesario que contara con 10 votos que se alcanzaron gracias al acompañamiento de los parlamentarios del oficialismo, de la UCR, MPF y el de la justicialista Siracusa que voto en disidencia respecto de su par de bancada, ya que Barrientos, los legisladores del Frente para la Victoria y Liendo, del PP, votaron contra la incorporación del asunto al orden de día.
Este mismo tablero de votos fue el que se dio al momento de definir la aprobación del proyecto que viene a reemplazar la actual ley de educación, que está vigente desde inicios de la década de los 90.
Quienes votaron a favor aseguraron que la norma sancionada se nutrió de la mayoría de los aportes efectuados por el sector docente, salvo en lo referente al carácter de las resoluciones del Consejo de Educación y al financiamiento del sistema. En tanto que los argumentos esgrimidos por quienes se opusieron a la sanción de la ley fueron diversos. El justicialista Barrientos manifestó su negativa no al texto del proyecto sino al procedimiento seguido para su aprobación. Desde el Frente para la Victoria se argumentó la existencia de profundas divergencias políticas con el proyecto de la mayoría.
Mientras los legisladores terminaban de aprobar la ley por 10 a 5; un grupo de dirigentes del SUTEF y de docentes comenzaron a convocarse frente al portón de acceso del predio que alberga el recinto de sesiones, pero el importante operativo de seguridad montado por la Policía les impidió ingresar. De todas maneras se apostaron en cada una de las salidas, lo que obligó a que, una vez finalizada la sesión, los Legisladores debieran utilizar una vía alternativa de salida para evitar tomar contacto con los manifestantes.
