L
a Municipalidad de Ushuaia, que ayer comenzó la distribución de las tarjetas del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) vigente en varios distritos del país, estimó que planean entregar unos 20 mil plásticos entre los usuarios del servicio públicos de pasajeros, según confirmaron a EDFM fuentes oficiales.
De este modo, las dos principales ciudades fueguinas contarán con el mismo sistema de boleto electrónico, ya que Río Grande lo implementó en marzo de este año.
La distribución de SUBE en la capital fueguina empezó en la víspera de manera gratuita, entre los usuarios que ya contaban con una tarjeta anterior utilizada por el servicio de colectivos.
“Lo que estamos haciendo es reemplazar las tarjetas anteriores por las SUBE, sin costo alguno y con la sola presentación del documento de identidad. Los colectivos ya están preparados para la utilización del nuevo sistema”, confirmó el subsecretario de Gobierno municipal, Horacio Herrera.
El funcionario explicó que la empresa prestataria del servicio de colectivos, Autobuses Santa Fe, quitará las bocas de expendio y de recarga de las tarjetas anteriores, a partir del 1 de octubre, aunque igual quedarán usuarios con tarjetas en su poder y créditos vigentes.
“La idea es que ambos sistemas convivan en forma simultánea hasta fin de año, y que luego solo queden las SUBE. Las unidades están preparadas para aceptar ambas modalidades sin problemas”, detalló Herrera.
Mientras tanto, la Municipalidad habilitó 21 puntos de recarga de las tarjetas SUBE en diferentes sitios de la ciudad, al tiempo que dispuso de cuatro lugares para la consulta y acreditación de saldos realizada por Internet.
“En principio estamos cumpliendo con la ley que obliga a implementar el mecanismo en todas las capitales de provincia y en las ciudades de más 200 mil habitantes. Y además estamos ayudando a universalizar un sistema que permitirá viajar en Ushuaia con la misma tarjeta con la que se viaja en Buenos Aires”, fundamentó el subsecretario.
Entre las ventajas del nuevo sistema, el funcionario mencionó que la SUBE permite hasta 600 pesos de carga en el distrito (contra los 99 pesos del sistema anterior) y además es una tarjeta personalizada cuyo crédito podrá transferirse a otro plástico de la misma persona en caso de robo, hurto o extravío, denunciado ante la autoridad competente.
“También habrá más ventajas. Con el paso del tiempo se agregarán más servicios y ya desde ahora podrán monitorearse datos de la empresa transportista, como montos de pasajes, cantidad de pasajeros transportados y kilómetros recorridos, que después constituyen información básica a la hora de establecer subsidios estatales”, comentó Herrera.
Melella primero
La llegada de las SUBE a Tierra del Fuego había comenzado a materializarse en febrero de este año, cuando el intendente de Río Grande, Gustavo Melella, firmó un convenio con el ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio Randazzo.
Al mes siguiente, la gestión de Melella comenzó la distribución de unas 10 mil tarjetas e instaló varios centros de recarga.
El jefe comunal sostuvo entonces que gracias al “respaldo y predisposición” de todos los involucrados en el tema, Río Grande cuenta con “este sistema para mejorar el servicio”.
Según Radazzo, la SUBE es “una herramienta fundamental y práctica para los pasajeros”.
“Evita que la gente tenga que tener cambio para viajar, que el chofer no tenga que cortar boleto ni dar vuelto, y además brinda información precisa a la empresa y al Estado”, enfatizó.
El ministro ya había adelanto la necesidad de que “toda Tierra del Fuego” pudiera tener acceso “al mismo sistema que ya se ha implementado con todo éxito en buena parte del país”, indicó.
En tanto el senador Julio Catalán Magni también valoró la agilidad con que la cartera de Transporte y los municipios locales se pusieron de acuerdo para llevar a cabo la aplicación de la SUBE.
En Ushuaia, el uso de la SUBE coincide con la implementación del boleto estudiantil, que fue establecido a través de una ordenanza votada el año pasado por el Concejo Deliberante.