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na peculiar situación se da desde hace algunos años en avenida avenida Perito Moreno al 3100. Allí, cada dos por tres hay desprendimientos de roca de variadas dimensiones que quedan a la vera de la calzada generando cierto riesgo para los automovilistas que transitan por el lugar.
Semanas atrás el tránsito debió ser interrumpido en el sector debido a que algunas de las piedras que cayeron de la corteza montañosa quedaron obstaculizando parcialmente la calzada. Es verdad que las piedras fueron retiradas rápidamente del lugar y que no ocasionó daños a tercero.
En los últimos días maquinaria vial despejó incluso la banquina que había quedado colapsada por la presencia del material rocozo, que regularmente se va desmoronando. Es un problema que se remonta a varios años sin que hasta ahora tenga solución.
Algunos automovilistas que transitan diariamente desde las 640 Viviendas hacia el centro de la ciudad, o viceversa, han manifestado su preocupación, toda vez que algunas de las piedras que caen intempestivamente pueda llegar a golpear contra algún vehículo ocasionando algún tipo de accidente.
Ciertamente los días en que más se observa el particular desprendimiento, son aquellos en los que se registran deshielos o grandes precipitaciones de lluvia. Esto pareciera erosionar el terreno que deriva en que las piedras caigan a metros de la calzada.
Evidentemente no es un problema de fácil solución, toda vez que contener el descenso de estas rocas demandaría un trabajo de ingeniería para lo cual no habría modo de afrontarlo.
Por sobre este sector rocozo se encuentra un nuevo loteo en el cual se están edificando viviendas y se han realizado apertura de calles para urbanizar dicho sector.
