E
l legislador Loffler nos dice a los ciudadanos de la Provincia mediante un comunicado publicado en Tiempo Fueguino el Lunes 7 del corriente año, que no votó las leyes dictadas los días 8 y 9 de enero pasado, porque tales normas atentaban contra el interés de los trabajadores, sus familias y los vecinos, expresando que había sido honesto en la campaña electoral con la ciudadanía, exponiendo que había que cambiar la realidad de Tierra del Fuego a partir de los aportes que puedan hacer otros sectores de la vida política, económica y social de la Provincia, y que reivindica su conducta de rechazar las iniciativas legislativas que vayan en contra de esos intereses, que él dice defender.
Me causa gran indignación que Loffler se quiera mostrar ahora como el campeón defensor de los vecinos y sus familias, cuando la verdad es que eso no es cierto, ni ahora, ni nunca, pues como legislador hizo todo lo contrario a lo que dice en este comunicado.
En el año 2003 aprobó una ley ilegítima y vergonzosa hecha solamente para despojarme de la concesión de Las Termas del Rio Valdez, una ley que prohíbe expresamente la concesión del recurso, cuando la tengo por contrato vigente y cuando además esa ley está en contra de lo que dice el Código Civil, lo que establece la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la Constitución Provincial y la Constitución Nacional.
Utilizando un mamarracho legislativo, me quieren robar el sacrificio, el esfuerzo y las inversiones millonarias efectuadas a lo largo de los años, perjudicando hasta el día de hoy a mi familia, a mi empresa y a todos los vecinos de la provincia que no pueden disfrutar de las aguas termales, como en otras épocas si lo hacían .
Después de esperar respuestas que nunca llegaban y cansada de la indolencia y la falta de interés de quienes son los representantes del pueblo, a fines del 2015 presenté al Presidente de la legislatura Roberto Crocianelli y para que éste en ese carácter de Presidente las girara a todos y a cada uno de los legisladores, un pedido formal de que se excluya de la legislatura a Loffler por desorden de conducta e indignidad en el ejercicio de sus funciones (Art. 105 C.P.). Nunca nadie me mandó nota de respuesta alguna sobre este tema.
Todo lo que pasó es por culpa de Loffler que la votó, de quienes lo acompañaron en su momento, de los que lo siguen acompañando, y ni que decir de los que hasta hoy, se siguen aprovechando de esa ley perversa e inmoral, para seguir perjudicándome.
Pero lo que es más grave es que después de tantos años, el sigue estando y cobrando sin hacer nada para evitar tanto daño y perjuicio a esta fueguina trabajadora y a su empresa, que ama a esta tierra entrañablemente y que por eso apostó todo lo que tenía para un futuro mejor.
Con gran hipocresía y cinismo, el legislador nos quiere convencer que su conducta ha sido la de rechazar las leyes que vayan contra el bien común, cuando al finalizar su comunicado nos dice que los dirigentes políticos se deben adelantar con el ejemplo y construir desde las diferencias, con un intercambio respetuoso de opiniones la salida a un futuro mejor y poniendo por encima de todo el interés común.
Sepa el pueblo de Tierra del Fuego quién es en realidad el legislador Loffler, y que cada uno saque sus conclusiones. Ni Loffler ni nadie, nunca me van a robar la dignidad.
ANGELICA DEL CARMEN MANCILLA
Socio Gerente de Transporte Roanmat S.R.L.
