ace muchos años aquellos estudiosos de la corteza terrestre, los geólogos, afirmaban que la tierra está en permanente movimiento, esto hace que todas sus latitudes sean propensas a los sismos, claro está, hay zonas más sensibles que otras y “nuestra provincia es muy vulnerable, está sobre el cinturón de fuego…” Lo más importante en estos casos es saber mantener la calma y no entrar en pánico, no olvidemos que, en esas circunstancias todas las personas estamos en la misma situación, tanto peatones como conductores.
Debemos saber cómo actuar durante y después del movimiento telúrico mientras conducimos, leamos algunas sugerencias:
• Hay que usar los sentidos, estar atentos y mantener la calma.
• Tratar de detenerse porque en los temblores la gente sale a la calle y todos tanto conductor como peatones están en busca de auxilio o auxiliando a alguien.
• Una vez detenido ponga freno de mano, encienda la radio y preste atención a los desprendimientos si los hubiere, en ese caso permanezca dentro del vehículo y póngase en posición fetal hasta que alguien acuda en su ayuda.
• Una vez terminado el sismo controle los daños del vehículo y si puede continuar hágalo despacio, en este tipo de situaciones no sabemos qué tipo de daños puede tener la calzada y muchas veces no son visibles.
• Conduzca con suma precaución, además de los diversos obstáculos y el caos vial convivirás con conductores más nerviosos, además de los semáforos y señalamientos inservibles.
• No olvide que si un poste del tendido eléctrico cae en su vehículo lo mejor es no moverse hasta que llegue ayuda, puede electrocutarse, no intente tocar ningún vehículo en estas circunstancias.
• Los túneles o bajo puentes suelen ser una trampa para los vehículos en estas circunstancias, si todavía no entro evítelo pero si esta dentro, encienda luces de balizas, trate de escapar de la zona y estacione afuera junto al resto de los vehículos.
• Cuando estamos en situaciones extremas y es inminente la caída de materiales de gran porte, debemos bajarnos del vehículo y agazaparnos al lado de él, esto se llama “el triangulo de la vida”.
• Es aconsejable para los habitantes de zonas sísmicas, que porten en su vehículo además del botiquín de primeros auxilios, mantas, linternas, agua potable, guantes, fósforos, radio personal, medicamentos si padeciera alguna enfermedad y un silbato.
“Es de suma importancia dejar en claro que, ante este tipo de acontecimientos es fundamental mantener la tranquilidad y no entrar en pánico”.
(*) Tec. Sup. Seg. Vial. M.P. 2252
