Aparece el cadáver de un ex empleado judicial de Ushuaia
El 30 de noviembre de 1978

Aparece el cadáver de un ex empleado judicial de Ushuaia

30/11/2018
E

ste día, en el barrio porteño de Palermo, aparece el cadáver del abogado Guillermo Raúl Díaz Lestrem, quien se desempeñaba como defensor oficial en la Justicia en lo Criminal. En los años cincuenta había trabajado en el Poder Judicial de Ushuaia. Su  esposa, Nelly Esther Ortíz, se desempeñaba como fiscal en la capital fueguina, siendo una de las primeras mujeres en ostentar ese cargo en el país.
Ambos permanecieron hasta mediados de la década siguiente en la isla. Durante esos años Díaz Lestrem desarrolló una intensa actividad cultural, en particular dinamizado el teatro vocacional.
Cuando dejó Tierra del Fuego pasó a desempeñarse como secretario de la Justicia Federal en lo Penal de la Capital Federal. En tanto, Ortiz asumió como fiscal de Primera Instancia en el fuero Penal Económico. Ambos fueron secuestrados durante la última dictadura; Díaz Lestrem apareció asesinado, su esposa sigue desaparecida.
Díaz Lestrem había sido detenido y puesto a disposición del Poder Ejecutivo Nacional, el 30 de marzo de 1976. Por gestiones de la Asociación de Magistrados del Poder Judicial de la Nación, se logró ubicarlo en la cárcel de Devoto. Posteriormente fue trasladado a Sierra Chica, siendo brutalmente castigado en el trayecto, de resultas de lo cual sufre una sería afección en un oído. Cinco días después de su arresto, se firma el decreto de su cesantía al cargo que ejercía en el Poder Judicial (Semblanzas de los abogados y abogadas detenidos desaparecidos y asesinados entre 1970 y 1983 en Argentina. Ministerio Público Fiscal).
Cuando fue dejado en libertad, se enteró que en noviembre de 1976 su esposa había sido secuestrada.
En 1978, su domicilio era vigilado y comenzó a recibir amenazas telefónicas, por esa razón,  presentó un recurso de hábeas corpus preventivo en el Juzgado Federal en lo Penal N° 3, solicitando ser alojado en la Alcaldía del Palacio de Tribunales mientras se sustanciare la causa. Luego salió en libertad por no existir incriminación alguna en su contra. A pesar de ser aconsejado para que se marche al exterior, se negó a hacerlo mientras su esposa continuara desaparecida.
El 20 de octubre fue secuestrado. Por testimonios de detenidos en la ESMA se pudo constatar  que estuvo allí y que fue sometido a varias sesiones de torturas. Diez días después, su cadáver fue arrojado en la puerta del club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires.

Autor : Bernardo Veksler
Etiquetas
Cuál es tu opinión sobre la nota?
  • Me interesó
    83%
    10 votos
  • No me interesó
    17%
    2 votos