yer conocimos la historia de un comerciante demostró la madera de la cual está hecho. Se trata de Eduardo de “El Trebol”, un almacén de avenida Além que tuvo el valioso gesto de guardar, preservar y devolver una costosa cámara fotográfica. La misma fue olvidada por un cliente desconocido. El comerciante la puso en una estantería para que el resto de las personas la vieran, hasta que llegó un cliente que conocía a su dueño y finalmente se concretó la devolución. “Venían personas ofertando hasta 20 mil pesos para que se las diera si no aparecía el dueño. Obviamente les dije que no, porque tenía que volver a la persona que la perdió”, dijo el honesto comerciante.