El crimen de tres secundarios por otro conmueve a Patagonia
EL 28 DE SEPTIEMBRE DE 2004

El crimen de tres secundarios por otro conmueve a Patagonia

28/09/2021
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ste día, en el Instituto N° 202 ‘Islas Malvinas’ de Carmen de Patagones, un alumno de 15 años, identificado como Rafael Solich, dispara con una pistola contra sus compañeros de aula, provocando la muerte de Evangelina Miranda, Sandra Núñez y Federico Ponce e hiriendo a otros cinco, quienes cursaban el primer año del ciclo Polimodal.
La masacre se llevó a cabo a las 7:35, hora del comienzo de clases, Solich ingresó al colegio al que concurrían cuatrocientos estudiantes aproximadamente, con una pistola Browning calibre 9 mm (perteneciente a su padre, suboficial de la Prefectura Naval Argentina), dos cargadores y un cuchillo de caza escondidos en una campera militar.
Solich se colocó frente a la clase, tomó la pistola y disparó contra sus compañeros sin mediar palabras.
“El resto de los 29 alumnos del curso -de entre 15 y 16 años- entró en pánico. Unos se tiraron al piso y otros, como pudieron, intentaron huir. Unos corrieron hacia la biblioteca, otros hacia la salida” (Diario La Nación, 29/9/2004).
Después de vaciar el cargador, salió al pasillo, colocó un segundo cargador e hizo un nuevo disparo, esta vez hacia el kiosquero de la escuela, a quien no alcanzó a herir.
Siguió su camino por el pasillo principal del establecimiento hasta que uno de sus compañeros de aula, se le abalanzó y logró quitarle el arma, sin que ofrezca resistencia. Luego de enteradas las autoridades, fue arrestado.
El gobierno nacional dispuso dos días de duelo nacional. En todas las escuelas del país se realizó una jornada de reflexión.
La tragedia fue la primera masacre escolar consumada en América Latina, por un solo individuo con un arma de fuego.
“Horas después de la masacre, el adolescente -inimputable por su edad- había sido trasladado a Bahía Blanca, donde declaró ante la Justicia. Estaba lúcido, consciente de sus actos y confesó allí que en el último tiempo había tenido problemas con su padre, un suboficial de la Prefectura Naval” (op.cit).
Al iniciarse la causa judicial, Solich fue confinado a un centro de internación para jóvenes delincuentes en el partido de Ensenada.
Luego de ser declarado inimputable, Alicia Ramallo, la jueza que llevó el caso, se hizo cargo de su tutela y lo internó en un centro psiquiátrico juvenil en la localidad de San Miguel.
Su padre, Rafael Solich, fue condenado a 45 días de prisión por negligencia al dejar el arma al alcance de un menor.

Autor : Bernardo Veksler
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