os últimos días no han podido ser peores. Pasamos de un frío intenso, cercano a -35º C, a una copiosa nevada y hoy nos envuelve una densa niebla que no nos permite ver nada. Pese a todas estas inclemencias seguimos avanzando y acabamos de acampar muy cerca del almacén que montamos a 82º S. Según los cuentakilómetros de los trineos debería estar delante de nosotros, pero con esta niebla… Sin embargo, como siempre, Amundsen no ha querido correr riesgos innecesarios y ha preferido acampar y ver qué pasa mañana con el último de los almacenes que montamos hace unos meses”, así registra, este día, el diario de la expedición del noruego Roald Amundsen, en su marcha hacia el Polo Sur .
Al cumplirse cien años de la hazaña, el sitio web conamundsenalpolo.es republicó las vicisitudes que vivieron cada día los expedicionarios, en las condiciones extremas del tránsito antártico.
Explicaron que “el cuentakilómetros es una rueda instalada en la parte de atrás del trineo que gira según se avanza. Es un sencillo dispositivo mecánico que registra el número de vueltas que ha dado la rueda y por lo tanto nos indica con fiabilidad la distancia recorrida. De esta manera, y pese a la niebla, la brújula nos ha permitido mantener el rumbo y ahora estamos seguros de estar muy cerca del almacén. Pero hemos decidido acampar para no correr el riesgo de pasarlo de largo”.
Revelaron que “cuando el año pasado montamos los almacenes de provisiones, además de construir un gran montículo de bloques de hielo y coronarlo con una bandera (…) Dispusimos en todos los almacenes una línea de 20 palos de bambú con banderolas, distribuidas en dirección Este-Oeste (puesto que la dirección de nuestra ruta siempre es Norte-Sur), separados 900 metros entre sí y dejando el almacén en el centro”.
Este procedimiento les dio la confianza de que “aunque nos hubiésemos desviado diez kilómetros (…) teníamos la garantía de que al menos una banderola estaría en nuestro campo visual y siguiendo la línea encontraríamos el almacén”.
Contaban con la experiencia positiva de que los “otros dos almacenes, el de 80ºS y el de 81ºS los hemos encontrado sin dificultades. Realmente todos estamos seguros de que no vamos a tener problemas para encontrar también este, donde nos espera, al igual que en los anteriores, media tonelada de provisiones y suministros” (op.cit.).
