sta noche, seis destacados políticos peronistas logran fugarse de la cárcel de Río Gallegos y traspasar la frontera hacia Chile. Se trata de Jorge Antonio, Héctor Cámpora, Patricio Kelly, John William Cooke, José Espejo y Pedro Gomis; que habían sido detenidos por la dictadura militar que desalojó del poder a Juan Domingo Perón.
“Con el cambio de turno de los guardias, la noticia se conocería y hordas de policías y militares los rastrearían sin descanso” (Matías Bauso. Infobae, 18/3/2019).
El presidio de Ushuaia había sido puesto de nuevo en funcionamiento para alojar a los presos más resonantes. Uno de los detenidos allí fue Jorge Antonio, el empresario y financista del peronismo (…) Desde que llegó a Ushuaia buscó la forma de escapar de allí. Tejió redes con otros presos y con sus carceleros. Pero como el lugar de detención además era una base militar no encontró eco”.
“Los militares que habían ocupado los altos mandos en tiempos de Perón fueron trasladados a Ushuaia (...) Los camaradas respetaron a sus iguales pese a las diferencias ideológicas y esos privilegios se extendieron a los demás detenidos. Pero poco tiempo después, los más renombrados presos fueron trasladados a la cárcel de Río Gallegos”.
Antonio “descubrió que sus guardianes eran más receptivos a los incentivos y pequeños sobornos que facilitaba su generosa billetera. Allí la fuga empezó a ganar consistencia (...) En Río Gallegos, en uno de los recreos, apartó del medio del patio al mayor Alfredo Máximo Renner (…) y le contó de sus deseos. Renner escuchó impávido al empresario; sólo se agitó al principio (…) Luego se comprometió a confeccionar mapas y planes y varias opciones de acción”.
A partir de ese momento, “en cada recreo y en cada comida en común fueron avanzando en su propósito (...) Muy cerca de la cárcel había un frigorífico. Una de las posibilidades de escape era confundirse con los empleados durante un cambio de turno, aprovechando el tráfico de la entrada y salida de operarios. Para eso familiares de los presos ingresaron delantales blancos y gorros. Jorge Antonio también logró hacer ingresar algún arma que escondía en su colchón” (op.cit.).
Antonio decidió la conformación del grupo: Kelly, un hombre de acción; Cooke y Cámpora por su relevancia política; Espejo como líder obrero y Gomis, del gremio petrolero, acusado de negociados en YPF. Ellos lograron consumar la exitosa fuga.
