n un hecho histórico tanto en los institucional para la clínica San Jorge como para todo el sistema sanitario de Tierra del Fuego, este miércoles se realizó un notable procedimiento de ablación y donación múltiple de órganos destinados a transplante, de forma exitosa y por parte de personal profesional de la provincia.
El Dr. Fernando Bertoletti, titular de la unidad de terapia intensiva de la clínica San Jorge, contó los pormenores del complejo y particular operativo que tuvo como eje el servicio que conduce en el sanatorio ushuaiense.
“Trabajamos cotidianamente con la gente de INCUCAI. Es responsabilidad médica de aquellos que hacemos terapia intensiva, como responsable de la unidad, siempre denunciar al ente regulador de la ablación de órganos y trasplante, aquellos pacientes potenciales donantes de órganos” relató el galeno.
En el caso actual, se trata de una mujer de la ciudad de Río Grande que tuvo un evento neurológico con ruptura de aneurisma: “Después de unos días de estar internada en terapia intensiva, lamentablemente se le dio diagnóstico de muerte cerebral” detalló Bertoletti. Así comenzó entonces el proceso de ablación de órganos, los dos riñones y las córneas. En este último caso, fueron destinadas a dos receptores de la provincia de Santa Cruz, que ya fueron trasplantados.
El médico comentó que, si bien no es la primera oportunidad que se hace un operativo de este tipo, “éste fue mucho más exitoso en cuanto a cantidad y calidad de los órganos”.
Cuando se hace la denuncia del potencial donante, se ponen en juegos diferentes protocolos, por ejemplo, el de evaluación de los órganos a donar. En este caso, se descartó la donación de otros órganos como páncreas e intestinos por cuestiones inherentes a la enfermedad.
“Todo se hizo con el recurso humano de la provincia, enfermeros y médicos del INCUCAI, del Hospital Regional de Ushuaia, con un cirujano ablacionista del sanatorio, más una cirujana del hospital” destacó luego.
Después de la ablación en el sanatorio, los órganos se envían por avión con destino a los receptores, que, si bien son de Santa Cruz, el trasplante se hizo en un nosocomio de la provincia de Buenos Aires.
El Dr. Bertoletti señaló las características tan particulares de este tipo de procedimientos médicos excepcionales: “En el máximo momento de dolor de una persona, que es la despedida de un ser querido, hay que agradecer profundamente a la familia. Eso es lo primero”, expresó, al tiempo que calificó como “el mayor acto de amor que uno puede hacer, la donación de los órganos de un ser querido”.
En Argentina las personas tenemos la potestad, de en vida, de manifestar voluntariamente la donación de órganos, como declaración jurada sencillamente a través de la aplicación Mi Argentina.
Finalmente, el médico agradeció y felicitó “al equipo de INCUCAI por la rapidez, buena voluntad y buena predisposición. Esperemos que sea el puntapié para que nosotros seamos sede y podamos empezar a desarrollar más procedimientos de este tipo”.
