lrededor de esta fecha, un avión Vickers de un sólo motor se estrella en un vuelo de exhibición. Nadie resulta herido, pero se dañan las alas. Así, se frustra el proyecto de Douglas Mawson de sobrevolar la Antártida.
El sueño del australiano de realizar el primer vuelo sobre el continente helado, “menos de una década después de que los hermanos Wright hicieron el primer vuelo a motor, quedó destruido incluso antes de que su expedición navegara hacia la Antártida” (Agencia Reuters, 2/1/2010).
El siniestro se produjo semanas antes de que el explorador australiano zarpara. “Sin tiempo para reparaciones, Mawson retiró las alas y se llevó el resto del avión, buscando usarlo como un ‘tractor de aire’ para arrastrar equipamiento por el hielo (...) con sus ruedas reemplazadas por trineos, el Vickers fue un fracaso. Su motor no encendió en el frío. Mawson, abandonó la máquina después de una falla durante su expedición de 1911 a 1914”.
Australia ha buscado durante varios años al antiguo avión en cabo Denison, donde el explorador lo abandonara.
“La Fundación Huts de Mawson, una (obra de) caridad con respaldo oficial que financia las obras de conservación en el sitio, cree que el avión quedó atrapado en el hielo después de que fue abandonado y luego se fue acercando hacia el mar junto al hielo glaciar durante los últimos 100 años”.
Finalmente, el primer día de 2010, una expedición descubrió lo que se cree son los restos del primer avión que llegó al continente helado, congelado en una costa donde fue abandonado hace casi un siglo. "La suerte estuvo de nuestra parte y ha sido un gran episodio en la historia de la aviación antártica", dijo Tony Stewart, líder de la actual expedición, luego del afortunado descubrimiento.
La expedición se topó “con las piezas de metal oxidado que conectaban dos rocas cubiertas de hielo en la costa de Commonwealth Bay durante una marea especialmente baja. Las piezas son iguales al hierro estructural del fuselaje del avión monomotor”.
Ese día, posiblemente fue el único “en varios años en el que las rocas estuvieron lo suficientemente expuestas y la marea lo suficientemente baja y estuvimos allí para verlo", dijo Stewart (op.cit.).
