n la Memoria de 1906, fechada este día, el director del Presidio y Cárcel de Reincidentes de Tierra del Fuego, Catello Muratgia, hace una detallada descripción de las realizaciones que venía efectuando la institución, entre las que destaca la labor que pudo consumar el “aserradero a vapor”.
Esta unidad productiva “no sólo ha servido para transformar 1036 rollizos en tablas y listones que sirven para la construcción del Edificio además del envío de maderas a la Penitenciaría Nacional de Buenos Aires (…) y la importante contribución para el aserrado de la madera a los habitantes de Ushuaia” (Carlos Pedro Vairo. El Presidio de Ushuaia Volumen II).
En cuanto a la proyección, Muratgia sostiene que podría hacerse “una explotación cinco veces mayor si contara con más presos y un método más eficaz para el traslado de la madera cambiando las yuntas de bueyes por un sistema de tren con Decauville”.
El funcionario explica que “se necesitan no menos de cincuenta yuntas de bueyes, o en sustitución de un menor número de estos animales, varios kilómetros de vía Deacauville. No pudiéndose adoptar el Xylocarril (vía con rieles de madera), que he hecho emplear en el transporte de las piedras que se extraen de la cantera, para ser empleadas en las construcciones de edificación, por cuanto la explotación de los bosques fueguinos obliga al frecuente cambio de instalación de vía…”
Destaca “la importancia de su traslado a un lugar más cercano al edificio, y no como estaba a más de dos kilómetros de distancia con los inconvenientes que causa al enviar penados y guardias tan lejos, sin mencionar los problemas de comidas y en la época de invierno la nieve y el hielo. Luego, se tenía que trasladar la madera ya lista; lo mismo sucedía con la leña y no menos penoso era el traslado de los rollizos al aserradero distante cuatro kilómetros”.
También se excusa de no haber “construido muebles por falta de oficiales muebleros y tallistas, que este año incluiré en el nuevo presupuesto que elevo a la aprobación del Señor Ministro”.
Junto a la “carpintería”, subraya el importante papel cumplido por “la herrería mecánica” y la “fundición” que prestaron “servicios inapreciables e imprescindibles” para la construcción y el mantenimiento del edificio, “han prestado grandes servicios a buques de la Armada Nacional que han fondeado en el puerto de Ushuaia” (op.cit.).
