ste día, asume interinamente la gobernación territorial el mayor de Ejército Juan Grandón, quien se desempeñaba como director del Presidio.
Luego de la renuncia de Gabriel Fernández Valdés, en 1918, que fue el gobernador que ocupó ese cargo por un mayor período de tiempo (1905-1918), comienza una sucesión de interinatos, que se inicia con Haroldo Simesen de Bielke. Que es sucedido por Cayetano Ripoll.
En 1920, se suceden Grandón (24 de abril- 7 de junio), Avelino Jiménez (hasta el 5 de Julio), Esteban Repetto (hasta el 30 de septiembre) y luego asume Carlos M. Molina, como gobernador efectivo hasta 1923.
Grandón tuvo “una larga carrera penitenciaria. En 1899 fue nombrado jefe del Presidio Militar de Puerto Cook (en la isla de los Estados); el destacamento de la Subprefectura quedó también a su mando” (Jorge Castelli- Patricia Halvorsen. Esas mujeres en la Patagonia austral).
En esa función, el 5 de mayo de 1900, trasladó a tres presos peligrosos a Río Gallegos porque resultaba imposible contenerlos en la unidad penitenciaria de Puerto Cook. En esa ocasión, Grandón informó que se había encontrado en la isla con un cerdo furioso y hambriento, al que le dio muerte en el acto. De ese hecho dedujo que podría ser el indicio de un posible naufragio. Al rastrear algunos tramos de la costa, descubrió los restos de una embarcación (probablemente el navío ‘Lina Hamburgo’) en cabo Colnett. Era una nave alemana que habría naufragado el 15 de marzo. En el sitio se encontraron varios cadáveres, que fueron enterrados en el cementerio de Puerto Cook, entre ellos, presumiblemente el del capitán y su esposa (Publicado por Oscar Domingo Gutiérrez en su columna Mensajero del Río. Diario El Sureño, 27/8/2009).
Posteriormente, formó parte de la comisión exploradora del río Santa Cruz, que procuraba un aprovechamiento de su importante caudal.
El 20 de enero de 1920, cuando estaba de visita en Río Gallegos, Grandón fue puesto en prisión por orden del juez letrado Ismael Viñas. Fue acusado de haber incumplido sus directivas, situación de la que pudo librarse gracias al pago de una fianza. También fue acusado de incautar los libros que agrupaciones solidarias le enviaban al anarquista Simón Radowisky, detenido en el penal de Ushuaia.
Luego de recuperar su libertad, retornó a Ushuaia y, el 24 de abril, asumió como gobernador interino del Territorio Nacional de Tierra del Fuego.
