n medio de la tensión entre el Gobierno nacional y Tierra del Fuego, el intendente de Río Grande, Martín Perez, lanzó un contundente mensaje contra la posible eliminación del régimen de promoción industrial en la provincia, tildando la medida de "electoralista" y "devastadora" para la economía local.
Sus declaraciones surgieron como respuesta a las palabras del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien insinuó que un anuncio económico había sido postergado para evitar críticas políticas.
Perez no solo rechazó la justificación oficial, sino que acusó al Ejecutivo de priorizar intereses externos y electorales sobre el bienestar de las familias fueguinas. "Lo que debe suspenderse definitivamente son las medidas que destruyen empleo en Tierra del Fuego", afirmó, y agregó que una eventual apertura importadora generaría la pérdida directa de más de 4.000 puestos de trabajo. "Es un panorama desolador, impulsado por el FMI y una campaña para ganar votos en Capital Federal", sostuvo.
El intendente fue más allá al vincular el conflicto económico con la soberanía nacional. Recordó que la provincia abarca las Islas Malvinas, el Atlántico Sur y la Antártida, zonas en disputa con el Reino Unido. "A 600 km de nuestras costas hay una base de la OTAN. Los ingleses explotan nuestros recursos: petróleo y pesca. Desindustrializar esta región es renunciar a nuestra presencia estratégica", advirtió.
Además, desmintió la narrativa que reduce la producción fueguina a la electrónica. Detalló que la provincia fabrica silobolsas para el campo, desarrolla industria química, potencia la pesca y avanza en proyectos turísticos. "Hay una inversión millonaria en tecnología y formación laboral. Quieren desmantelar esto con discursos falaces", denunció.
Perez ratificó su apoyo a las protestas sindicales y llamó al diálogo para buscar alternativas sin caer en "soluciones mágicas" como la liberalización de importaciones. Su postura refleja el malestar general en la provincia, donde el fantasma de la desindustrialización aviva temores económicos y geopolíticos.