Un intercambio cultural sin precedentes

Los fines del mundo, unidos por una muestra artística y fotográfica

25/03/2007
U

shuaia y Skagen, en la lejana Dinamarca, son dos ciudades que internacionalmente se han convertido en puntos de referencia por ser los "fines del mundo". Por eso en el marco de la 1° Bienal del Fin del Mundo, del 29 de marzo al 30 de abril próximo en el Foyer de la Casa de la Cultura en la capital fueguina, las dos localidades serán las protagonistas de una muestra fotográfica que busca propiciar un intercambio entre estas dos comunidades hermanadas, pese a sus marcadas diferencias.
La muestra "Los Fines del Mundo" (Verdens Ender, en danés) fue creada bajo el concepto de globalización, e identidad cultural, desde un punto de la significancia para el individuo, que está inserto en estos contextos. La exposición, que se debate entre artística y documental, es una creación exquisita de los fotógrafos daneses Nikolej Callesen y Mai Staunsager, que en este caso han desarrollado la experiencia mediante tres categorías de expresiones: por un lado una exhibición de doce obras fotográficas distinguidas -acompañadas de sonidos propios-; por otro, un concierto de música electrónica experimental; y una publicación de un diario que reflejará paralelamente, en los dos idiomas, noticias, editoriales, clasificados, etc., de la capital fueguina y Skagen. El ejemplar será publicado y distribuido por este medio.
La ciudad dinamarquesa, turística por excelencia, está ubicada el extremo de la península donde convergen los mares. Allí simultáneamente se montará un sendero de interpretación natural para realizar una proyección de fotos de paisajes fueguinos, sobre otras vistas como dunas, el mar, o montañas como una forma de intervenir un paisaje con otro.

Visiones

El productor general de la muestra, Jan Samuelsen, y mentor del proyecto, expresó que "esta experiencia abre una puerta para debatir sobre el significado el mundo global para el individuo, del lo cual poco se habla". Consideró que "más que un mundo mercantil la globalización es un estado mental", donde -sostuvo- "necesitamos la relación humana, cara a cara".
Por su parte, la artista Mai Staunsager contó a el diario que la iniciativa comenzó a gestarse hace un año y que "las obras buscan ser una expresión mental de estos conceptos, en una búsqueda plena de imagen que trascienden el límite de lo vano y la naturaleza". De algún modo, la mujer reconoció que se produce un paralelismo, que al mismo tiempo se vacía del sentido de comparación. "A veces es difícil decir a dónde pertenece el paisaje, y así queremos jugar con esa idea, para de alguna manera formar un tercer lugar que es el lugar global", concluyó.

Etiquetas