l ministro de Educación, Jorge Rabassa, reafirmó que el Gobierno realizó "todos los esfuerzos necesarios para agotar las instancias de negociación" con el SUTEF en torno del reclamo salarial docente, y responsabilizó al sindicato que nuclea a los maestros por llevar adelante medidas de fuerzas que tuvieron repercusión en toda la comunidad fueguina.
En conferencia de prensa, Rabassa resaltó que la cartera a su cargo cumplió con los compromisos establecidos y firmados en el acta paritaria nacional del 22 de febrero en la que se fijó el salario mínimo nacional de 1290 pesos sumado a la zona del 100% para el caso de Tierra del Fuego. "Aún en los casos más desfavorables a través del aumento de emergencia otorgado por la gobernadora se supera ampliamente el monto de los 2580 pesos correspondientes para la Provincia", indicó el ministro.
Para Rabassa, el Gobierno cumplió con el piso salarial acordado por la paritaria nacional docente a través de la recomposición salarial del sector y resaltó que el Poder Ejecutivo debió efectivizar la medida mediante un decreto ante la imposibilidad de lograr un acuerdo en al ámbito paritario provincial.
El Ministro de Educación observó que "si no fue posible cumplir con la expectativa del sindicato de otorgar a todo el escalafón docente el aumento del 24% fue debido a la falta de concreción de los fondos nacionales gestionados oportunamente ante las autoridades competentes, dificultándose a la fecha su obtención producto de la severa crisis que atraviesa el Gobierno Nacional".
El funcionario aseguró que "a pesar de la inflexible postura del sindicato, los esfuerzos por parte de las autoridades de la cartera educativa continuarán a efectos de poder lograr un acuerdo, aunque sea parcial, en el marco de un nuevo escenario a partir de la conciliación obligatoria.
"El Gobierno no tiene nada que ocultar". Así Rabassa resaltó la decisión del Gobierno de llevar adelante la "extensa" paritaria del pasado jueves que fue televisada por los canales estatales.
En tanto el secretario de Educación, Daniel Masnú, señaló que fue posible transparentar la discusión y el análisis presupuestario quedando en evidencia la discusión "estrictamente salarial que pretende debatir el sindicato, como así también la inviabilidad política, económica y social de la propuesta salarial exigida por los dirigentes gremiales".
"La responsabilidad política más concreta que afrontamos es la imposibilidad de otorgar aumentos salariales sin tener en cuenta la administración pública en su conjunto y menos aún sin considerar las necesidades sociales que reclama la Provincia, en el contexto en que estamos insertos", concluyó Masnú.