U
n empleado judicial quedó detenido, mientras que otro con pedido de captura presentó una caución real de 25 mil pesos para no ser detenido, en una causa donde se investiga la extorsión que habría sufrido una funcionaria judicial.
Ambos sujetos se encuentran seriamente comprometidos por una carta extorsiva que le llegó a la secretaria del juzgado, la doctora Ona Rogers, brindando datos de su hijo y exigiendo 45 mil pesos para evitar que lo tuviera que “perder”. De inmediato personal policial realizó las investigaciones del caso logrando detener a Sebastián Vanone, quien fue conducido a prestar declaración indagatoria a los tribunales del Campamento YPF.
Mientras tanto otro empleado del Juzgado Federal, Matías Pérez, ya se comunicó desde Buenos Aires, donde se encuentra de vacaciones, para presentar una caución real a fin de poder presentarse sin ser detenido.
Respecto al contenido del sobre entregado por un tercero, quien acusó que el mismo le fue entregado por los empleados del mismo juzgado de la funcionaria damnificada; trascendió que el mismo contenía información detallada de los movimientos del hijo de la denunciante y se solicitaba una suma de 45 mil pesos para no atentar contra el joven.
Vanone es representado legalmente por el abogado Pedro Fernández, quien inicialmente explicó que “se habría tratado de una broma”, contrastando con la información “altamente calificada”, que describía la misiva.
En tanto en las últimas horas de este miércoles el segundo empleado judicial involucrado, identificado como Matías Pérez, presentó una caución real por 25 mil pesos a fin de dejar sin efecto su pedido de captura, con el compromiso de presentarse el próximo sábado, cuando arribe a la provincia proveniente de Capital Federal. Pérez también está considerado como co autor intelectual de este hecho, situación que ha desatado un verdadero escándalo en el Juzgado Federal Río Grande.
