E
l Tribunal Oral en lo Criminal de Ushuaia condenó ayer a diez años de prisión al joven de 22 años acusado de golpear y arrojar por una escalera a un adolescente de 15 que perdió la vida al día siguiente, luego de un incidente ocurrido el año pasado en el barrio Los Morros.
Los jueces Alejandro Pagano Zavalía, Roberto Magraner y Maximiliano García Arpón absolvieron también al médico que atendió a la víctima cuando ingresó golpeado al Hospital Regional Ushuaia, y al que le imputaban haber actuado con negligencia.
El veredicto del caso fue dado a conocer ayer pasadas las 13 en la sala de audiencias de tribunales, en la última jornada del juicio oral y público que había comenzado la semana pasada.
La condena recayó sobre Fernando Gabriel Fuentes Ponce, a quien el tribunal consideró autor del delito de homicidio y le aplicó la misma pena solicitada por la fiscal Marcela Bragulat.
Incluso la titular del Ministerio Público había requerido en su alegato del lunes la absolución del médico Fernando Razzini, a pesar de que el profesional había sido acusado de presunto homicidio culposo.
El hecho sujeto a investigación ocurrió el 5 de septiembre de 2010 en un edificio de departamentos.
En ese lugar, el chico fue golpeado por Fuentes Ponce, quien según las constancias judiciales le aplicó golpes de puño y patadas en el rostro y en el cuerpo (especialmente en el abdomen) antes de arrojarlo por una escalera.
La víctima, además, sufría una enfermedad congénita por la cual le habían implantado una “ampliación en la vejiga con sondaje intermitente”. Por esa dolencia tenía contraindicada la ingesta de alcohol aunque esa noche su agresor le habría suministrado ese tipo de bebidas “en dos oportunidades”, de acuerdo a la acusación de la Fiscalía en la causa penal.
Después, cuando el joven herido fue trasladado por su madre al Hospital, lo atendió el médico Razzini, y a partir de ese momento dio inicio la controversia judicial acerca de si el facultativo hizo todo lo que estaba a su alcance para diagnosticar el tipo de lesiones que presentaba.
El adolescente fue dado de alta y tras regresar horas más tarde dolorido, y con síntomas más graves, terminó falleciendo.
