Fuga de presos y sospechas en la Unidad de Detención de Río Grande
Sólo uno de los cuatro reclusos fue recapturado

Fuga de presos y sospechas en la Unidad de Detención de Río Grande

18/10/2012
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a Policía de Tierra del Fuego continúa buscando en la provincia a tres de los cuatro presos peligrosos que se fugaron antenoche de la Unidad de Detención Nº 1 de Río Grande.
Uno de los reclusos, David Ojeda, alias “La Muerte”, de 20 años, fue encontrado ayer a la mañana mientras caminaba por el centro riograndense, donde fue visto por un vecino que dio alerta a las autoridades, mientras que del resto aún se desconoce su paradero.
El caso adquirió otra dimensión ante la sospecha de que los reos podrían haberse fugado con “ayuda interna”, y que ello podría tener relación con el malestar que existe dentro del Servicio Penitenciario por los casos de condenas y procesamientos a efectivos de ese organismo en causas de torturas.
Las autoridades provinciales, en especial el secretario de Seguridad, Daniel Facio, no desmintieron esa hipótesis y por el contrario dejaron abierta la posibilidad de profundizar la investigación en esa línea una vez que los presos sean recapturados.
Para ello se montó un operativo cerrojo en toda la provincia y el juez de Río Grande Héctor Ochoa, a cargo de la investigación, ordenó más de diez allanamientos en domicilios de ambas ciudades sin que hasta el cierre de esta edición se hubiera producido ningún hallazgo.

De película

Ojeda, Claudio Fabián Borquez Cárdenas, alias “Mandinga”, de 38 años, Daniel Eduardo Villegas (26) y José Cancino Saldivia (27) se escaparon apenas pasada la medianoche del miércoles, luego de limar los barrotes de una celda (o cortarlos con una hoja de sierra) y de saltar tres muros sin ser vistos por los guardias.
Salvo Cancino, al que le faltaba poco para acceder al beneficio de la libertad condicional porque estaba condenado a 16 años de cárcel por un homicidio, los demás purgan condenas de prisión perpetua por otros homicidios cometidos en la isla.
Ojeda, oriundo de Río Grande, fue condenado en 2012 a esa pena por el doble crimen de los ancianos Héctor Techeira y Delia Briz, a quienes mataron de cerca de 100 puñaladas en abril de 2011 en Chacra XIII.
Villegas y Borquez Cárdenas habían sido trasladados desde Ushuaia tras ser sentenciados a reclusión perpetua por ser coautores del crimen a mazazos de Héctor Nenén, sereno de la “Pesquera del Beagle”, ocurrido el 27 de febrero de 2010.
En 2005, Villegas protagonizó otro hecho de fuga desde la alcaidía de Ushuaia y fue recapturado pocas horas después.
Cancino Saldivia, en tanto, estaba preso por el crimen de Rubén Alvarado, asesinado de 11 puñaladas en el barrio Perón, en junio de 2005.
Tras la fuga, la Policía montó dispositivos en todo el territorio provincial que incluyeron controles en los pasos fronterizos a Chile y en los vehículos que circulan por la Ruta Nacional 3 entre Ushuaia y Río Grande.
Por su parte la Justicia había ordenado ayer a la tarde varios allanamientos en domicilios de ambas ciudades que se llevaron a cabo en forma simultánea para lograr dar con los reclusos. En Ushuaia los procedimientos fueron en dos departamentos del barrio Monte Gallinero, en el barrio San Salvador y en el barrio Kaupén.

Sin cámaras, acción

El director del Servicio Penitenciario provincial, Alberto Nuñez, admitió que en el momento de la fuga no funcionaban las cámaras de seguridad, a la vez que admitió falencias en el sistema de guardias por falta de personal.
“Fuimos vulnerados”, evaluó Nuñez, aunque aclaró que “no fue porque no se hayan tomado las precauciones debidas” sino por las falencias del “sistema”.
El funcionario también confirmó que en la cárcel “hay un perímetro de alambrado, un segundo perímetro más alto y finalmente un perímetro de cemento”, y que los tres obstáculos fueron superados.
Por su parte, el secretario de Seguridad, Daniel Facio, admitió “falencias” en la infraestructura de la Unidad de Detención de Río Grande, y no descartó que los presos puedan haber recibido ayuda interna para escapar.
“Se puede presumir que si, no está fuera de las consideraciones. Pero vamos a ahondar en estos temas luego de la recaptura de los tres delincuentes que faltan”, indicó.
También dijo que las cámaras de seguridad “están en proceso de adquisición. Estamos trabajando muy fuerte en eso”, observó.
Facio fue citado para el martes próximo por la comisión de Justicia y Seguridad de la Legislatura fueguina, cuyo titular, el radical Pablo Blanco, calificó la situación del servicio penitenciario como “preocupante”.

Un concurso de precios poco oportuno

Cámaras para Casa de Gobierno pero no para la cárcel

El secretario de Seguridad, Daniel Facio, admitió ayer que la Unidad de Detención Nº 1 de Río Grande carece de cámaras de seguridad en su perímetro exterior, lo que facilitó la fuga de cuatro presos peligrosos el miércoles a la noche.
Sin embargo, según la resolución Nº 079 de la Secretaría de Gestión, suscrita el 27 de agosto de este año por la secretaria Eliana Villarreal, y publicada en el Boletín Oficial Nº 3077, se autorizó el llamado a concurso de precios 49/12 para la adquisición de un sistema de videovigilancia destinado a la Casa de Gobierno.
A través de la medida se formó una comisión de preadjudicación y análisis de las ofertas, y mediante los anexos se estipularon las condiciones a ser cumplidas por los oferentes.


Facio a la Legislatura

Los legisladores que integran la Comisión de Justicia y Seguridad resolvieron convocar para el próximo martes al Secretario de Seguridad, Daniel Facio, para que les brinde precisiones sobre cómo se concretó la fuga de cuatro presos de la unidad de detención de Río Grande, ocurrida durante la noche del miércoles de esta semana.
Además, los parlamentarios Pablo Blanco, Susana Siracusa, Fabio Marinello, Jorge Lechman, Myriam Martínez y Adrián Liendo pretenden que el funcionario les informe sobre el actual estado de funcionamiento del servicio penitenciario, sus deficiencias y requerimientos.

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