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a senadora nacional Rosana Bertone instó ayer al Estado provincial y a los municipios a involucrarse en el tendido de redes de gas dentro de las ciudades de Tierra del Fuego para que tenga un efecto concreto la obra del gasoducto fueguino que incrementará la capacidad de transporte del fluido entre Río Grande y Ushuaia.
Bertone advirtió que aunque el gasoducto está licitado y podría estar terminado incluso antes de la temporada invernal, no llegará a la gente como una solución específica si las distintas administraciones estatales no realizan trabajos complementarios.
La ducto de transporte de gas “es un buen avance” pero “el gran tema son las redes internas”, observó la parlamentaria nacional del Frente para la Victoria.
“Como la empresa distribuidora Camuzzi Gas del Sur no construye los tendidos hasta el medidor de las casas de los vecinos, como corresponde que haga, muchas veces son las mismas personas o empresas quienes tienen que afrontar esos costos y no pueden hacerlo”, señaló la senadora, y se preguntó si no es tiempo de que intervenga el Estado para suplir esa carencia.
“Hay muchos barrios en Ushuaia que tienen el problema de que no pueden ni siquiera presentar un plano de gas aprobado por Camuzzi, como es el caso de Andorra. Y otros que sí tienen las mensuras, los deslindes y otra documentación (como es Alakalufes II) y tampoco se les suministra el gas”, detalló también la funcionaria.
Según Bertone, a raíz de ello, el Estado provincial junto con los municipios podría intervenir en el tendido de estas redes, e incluso financiarlas con recursos del propio Fideicomiso Austral con que se está solventando el gasoducto.
La ex candidata a la Gobernación en 20011 dijo que ya planteó esa inquietud en reuniones del Fideicomiso pero que la provincia “no lo consideró un tema prioritario”, como tampoco exigir a Camuzzi o al Enargas que “tomen las medidas que corresponde y dejen de hacerse todos los distraídos”.
Al respecto, recordó que históricamente las distribuidoras argumentan que producto del bajo nivel de las tarifas no pueden afrontar inversiones de este tipo, aun cuando el Estado Nacional creó fondos fiduciarios e hizo aportes especiales establecidos por ley.
“El Estado provincial tiene por Constitución la facultad de intervenir cuando estos servicios básicos no se prestan de manera adecuada. Especialmente porque, en el caso del gas, la provincia es la dueña del recurso dentro de nuestro territorio”, enfatizó Bertone.
Intervención estatal
La senadora cargó contra los funcionarios provinciales y municipales que en invierno se quejan de los altos niveles de subsidios que deben afrontar para que la gente pueda adquirir tubos o garrafas, y sin embargo no encaran la solución de fondo como sería el tendido de las redes domiciliarias.
“Desespera ver este tipo de actitudes. Algo hay que hacer, porque para los vecinos es imposible asumir una deuda de 200 mil pesos como muchas veces cuesta una conexión. Hay funcionarios que pretenden empezar por los barrios más antiguos de la ciudad. Yo creo que debería ser para cualquier persona o urbanización que cuente con planos aprobados”, explicó Bertone.
En relación a la obra del gasoducto, la parlamentaria contó que en la última reunión del Fideicomiso Austral, las autoridades del Gobierno Nacional (de la Secretaría de Energía y el Enargas) informaron que ya se había pagado el anticipo financiero para el comienzo de la obra.
“Entendemos que las dos empresas han contratado a sus trabajadores y ha quedado sin licitar un último renglón pero nos dicen que para ese trámite todavía hay tiempo. La obra tendría que estar más avanzada y los tiempos están muy justos para llegar a finalizarla antes del invierno. No digo que sea imposible pero no hay demasiado margen. Depende del ritmo que se le imprima a los trabajos. Estamos esperanzados en que se termine antes del invierno pero no es fácil de lograr”, señaló.
Bertone también se pronunció por priorizar obras como el interconectado eléctrico entre Ushuaia y Río Grande, que permitiría un significativo ahorro del gas consumido para generar energía eléctrica en Ushuaia, y facilitaría “la integración de Tolhuin, que tiene severos problemas de energía eléctrica, además de posibilitar nuevas inversiones en materia industrial”, indicó.
