una semana de que YPF anunciara la aplicación de una rebaja del 1,5% en el precio de venta al público de sus combustibles, los surtidores de las estaciones de servicio de Tierra del Fuego manteniendo los mismos valores que rigen desde el 23 de octubre. Otro tanto ocurre en la única estación de servicio que comercializa, en Río Grande, los combustibles de Axión.
La razón por la que la provincia no se vio alcanzada por la esa disminución de precios es que los combustibles que abastecen el mercado local no contienen, por cuestiones operativas, bioetanol.
Como la rebaja en cuestión respondió a la decisión del Gobierno nacional de ajustar a la baja las fórmulas de cálculo de precios de los biocombustibles -lo que se tradujo en una rebaja promedio del 25% para el bioetanol de maíz y del de caña de azúcar- que obligatoriamente deben integrar en un 12% las naftas de uso automotor, ese beneficio no se trasladó, como si sucedió en otras provincias, al valor de los combustibles líquidos que se comercializan en Tierra del Fuego.
En función de ello, el litro de nafta súper sigue costando en los surtidores de Ushuaia 16,30 pesos, y 19,38 pesos el de nafta Infinia.
