a Policía de la Provincia comenzó a centrar la búsqueda de Nicolás Duarte Luna en la ruta complementaria H, luego de haber recibido el testimonio de una persona que dijo haber visto a un hombre que responde a las características del joven buscado desde hace más de un mes, en cercanías a estancia San Luis, distante unos 30 kilómetros al sur de Río Grande.
El testigo dijo haber visto a un individuo calvo, con bigote y un poco de barba, que caminaba a la vera de la ruta 3, acompañado de un perro, lo que es un dato clave en la búsqueda de Duarte Luna, ya que al momento de desaparecer de Tolhuin, el pasado 30 de abril, lo hizo acompañado de dos canes.
Este martes, 11 de junio, las autoridades de la Comisaría de Tolhuin, de la Policía de la Provincia recibieron la declaración del testigo y a partir de ello procedió a destinar efectivos y un perro adiestrado en el seguimiento de personas, en la zona aledaña a la estancia antes mencionada.
Si bien las tareas desplegadas este miércoles por la Policía en la zona no arrojaron resultados positivos, los dichos del testigo encendieron una luz de esperanza en la intensa búsqueda que se despliega en la provincia de Nicolás Duarte Luna, quien fue visto por última vez camino al cerro Michi.
Antecedentes del caso
Una fotografía tomada en Tolhuin por una cámara de seguridad, muestra el modo en que Nicolás Duarte Luna salió el 30 de abril pasado del lugar donde se alojaba para desaparecer luego sin dejar ningún rastro. La policía provincial difunde la imagen solicitando la colaboración de la población para dar con su paradero, ya que a pesar de los intensos operativos de búsqueda en los que participan varias fuerzas de seguridad, como la Comisión de Auxilio, no se ha logrado aún encontrar alguna pista.
El padre del joven de 29 años oriundo de Buenos Aires declaró que su hijo estuvo internado por problemas psiquiátricos. El hombre contó que Nicolás tuvo “problemas con las drogas” a los 26 años, y que estuvo internado en una clínica y en un hospital psiquiátrico, aunque “salió de ambos con alta médica”.
Hace ocho meses atrás, Duarte Luna se fue de Buenos Aires, para emprender un viaje por la Patagonia, llegando hasta la ciudad de Tolhuin, donde se quedó residiendo porque había conseguido empleo en un aserradero; pero sucedió un incendio en la cabaña que le proveían los dueños de la empresa maderera, por lo que se había quedado sin alojamiento.
“La última vez que hablé con él fue el 26 de febrero. Perdió el celular, me pidió dinero, y resulta que no atendió más el teléfono. Ni a mí ni al hermano. En una de las últimas comunicaciones le ofrecí pagarle el pasaje de avión y le ofrecí venirse a vivir conmigo, pero no estaba bien”, dijo el padre del joven desparecido, a los pocos días de producirse la desaparición.
