sto del COVID-19 nos transformó la vida todos. Tuvimos que dejar de lado los abrazos, besos, juntadas con amigos, familiares y mucho más. El aislamiento fue un momento muy duro, pero lo bueno es que muchos no perdieron la buena onda y siguen poniéndole el mejor deseo para el futuro, planificando y diciendo “cuando todo esto pase...”. Ya queremos que llegue ese momento, pero por ahora, hay que seguir cuidándose.